El Tribunal Supremo (TS) en una nueva sentencia ha establecido que los datos que circulan por Internet, a través del programa eMule u otros de similares características tipo P2P, son datos públicos. La Policía puede acceder a ellos sin autorización previa. Los rastreos informáticos del equipo de Delitos Telemáticos de la Policía Judicial de la Guardia Civil en Internet tienen el amparo de la Ley, siempre y cuando se trate de programas de difusión masiva de datos, pasando a considerarse datos de dominio público. En este término es donde el debate sobre los límites de la privacidad en Internet cobran más importancia. Desde esta unidad de la Policía, denominada «policía cibernética» se persiguen delitos informáticos, lo que popularmente denominamos «cibercrimen».
Esta unidad fue creada para investigar, dentro de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, todos aquellos delitos que se sirven de Internet o de las nuevas tecnologías para su comisión. Su origen se remonta al año 1996. Desde entonces ha estado sujeta a numerosas ampliaciones y mejoras del equipo de investigación. También ha tenido una gran implicación en el desarrollo e investigación de nuevas tecnologías con el fin de luchar contra el crimen en la Red. Actualmente participa en numerosos foros constituidos como un referente de la colaboración internacional entre las unidades de lucha contra la delincuencia informática a nivel americano, y nexo de unión con otros foros a nivel europeo.
«Quien utiliza un programa P2P asume que muchos de los datos se convierten en públicos para los usuarios de Internet, circunstancia que conocen o deben conocer los internautas», dice un miembro de este equipo que prefiere no identificarse. Es por ello, en resumen, por lo que se consideran legítimos los rastreos efectuados por esta unidad de la policía. Así que, los que tiran del Emule a todas horas ya saben a qué atenerse si algún día la polícía los rastrea…