El banco suizo UBS, uno de los más afectados de Europa por la crisis hipotecaria de Estados Unidos, presentó ayer sus resultados de 2008 con pérdidas netas de 19.697 millones de francos suizos (casi 13.090 millones de euros), lo que supone más del triple que en 2007 y las mayores pérdidas anuales del banco en toda su historia.
Este dato negativo se produce a pesar de la reducción del gasto en personal por parte de la entidad suiza, que despidió a 1.782 trabajadores en el cuarto semestre de 2008, invirtiendo un 41% menos que en el mismo trimestre de 2007 en este concepto.