Una de las grandes preguntas que todos nos hacemos a la hora de diseñar una campaña de e-mail marketing es ¿cuál es el mejor día de la semana para lanzarla? La mala noticia es que todos los estudios que se han hecho en este campo son poco concluyentes: depende del tipo de campaña.
Como mucho, podemos aproximarnos algo si tenemos en cuenta audiencias muy similares y campañas que comparten los mismos objetivos. Teniendo en cuenta esto, pasemos a revisar los pros y los contras de cada día de la semana.
Lunes
Puntos positivos: los buzones de correo todavía no están saturados de mensajes sin leer.
Puntos negativos: es uno de los días en los que los trabajadores disponen de más energía para aplicarse al máximo en su tarea, por lo que dedican menos tiempo a otras cosas.
Si enviamos nuestro e-mail en lunes: es mejor realizarlo a media mañana, una vez que los trabajadores hayan terminado de borrar todo el correo «no deseado» que han recibido durante el fin de semana.
Martes
Puntos positivos: generalmente los destinatarios ya han planificado bien la semana y disponen de más tiempo para consultar e-mails no relacionados con su trabajo.
Puntos negativos: puede quedar descolgado en medio de la semana.
Si enviamos nuestro e-mail en martes: enviaremos e-mail en martes únicamente cuando requieran una respuesta que pueda darse en horario laboral. De lo contrario, normalmente el lector olvidará lo que haya leído.
Miércoles-jueves
Puntos positivos: muchos están ya preparando sus fines de semana, por lo que son receptivos a nuevas ofertas interesantes.
Puntos negativos: efecto parecido al de los martes, solo que peor. Diponen de menos tiempo para responder ante que llegue el fin de semana por lo que muchas veces, la decisión de compra se puede retrasar hasta la semana siguiente o quedar olvidada.
Si enviamos nuestro e-mail en miércoles o en jueves: enviar e-mails cuyo foco de atención sea el tiempo libre, las vacaciones o el ocio.
Viernes
Puntos positivos: los estudios indican que el viernes es el día en que menos e-mails se envían, por lo que los que llegan tienen mayor visibilidad que cualquier otro día de la semana.
Puntos negativos: los trabajadores están deseando desconectar de su semana laboral, por lo que se muestran menos proclives a abrir e-mails no relacionados con su trabajo.
Si enviamos nuestro e-mail en viernes: enviar una campaña de e-mail los viernes da a los consumidores dos días extra para decidir qué hacer o qué respuesta dar. Sin embargo, si el e-mail no es abierto el mismo viernes, acabará en la cola de los e-mails por leer el lunes, y probablemente no se lea.
Fines de semana
Puntos positivos: son muchos los que consultan su e-mail del trabajo incluso los fines de semana, por lo que puede ser una buena idea realizar un envío que no se encontrará con una excesiva competencia en las bandejas de entrada.
Puntos negativos: un e-mail comercial enviado en fin de semana puede resultar «ofensivo» para muchos receptores, que consideran que, después de todo, son sus días de descanso.
Si enviamos nuestro e-mail en fin de semana: si es posible, es mejor evitar realizar los envíos en domingo, centrándonos en los sábados, día en el que hay una mejor tasa de respuesta favorable.