Después de haber publicado algunos reportajes sobre las bases de todo blog corporativo, hoy queremos dar un paso más y explicar el concepto de audiencia, es decir el papel que juegan los lectores que acceden a nuestros contenidos.
Nuestra audiencia es el mejor indicador sobre la calidad de los artículos o posts que publicamos. Por eso, aprender del feedback que nos proporcionan es importante para mejorar, reforzando nuestros puntos positivos y evitando ciertas práctica que pueden hacernos perder clientes.
Hay muchas listas que clasifican los visitantes de un blog en función de su comportamiento en el mismo. Sin embargo, como hemos visto en otras ocasiones, el blog corporativo tiene ciertos elementos que lo diferencian de un blog personal, por lo que las herramientas que hemos de utilizar para medir a nuestras visitas, y la calidad de las mismas son algo diferentes. En este sentido no resulta tan interesante averiguar la actividad que realizan nuestros visitantes dentro del blog (comentarios, trackbacks, referencias, etc) sino sobre todo la que desarrollan fuera del mismo, entendiendo cómo nos perciben.
Hemos de entender que en el caso de los blogs contamos con un factor intangible de suma importancia: el tiempo. Nuestros lectores invierten una cantidad determinda de tiempo en leer lo que tenemos que decir, y esperan a cambio ser recompensados con un buen contenido. En función de la calidad del contenido que les proporcionemos actuarán de alguna de las 9 maneras que exponemos a continuación y que recoge la publicación on-line Lateral Action.
Niveles de interés
Spam
Si nuestro contenido no ofrece un ROI (Return of Investments) razonable, o simplemente nuestro contenido es completamente inservible, probablemente pasemos a ser considerados como SPAM. Ser considerados SPAM es la forma más rápida de perder toda nuestra credibilidad.
Superficial
Puede que lean el titular y alguna de las primeras líneas, para después ser considerado como un contenido superficial, que no aporta valor a nuestro lector. En este caso, nuestro lector todavía no nos considera SPAM, pero si continuamos publicando contenidos calificados como «superficiales» pronto a ser considerados como SPAM.
Ocasional
El lector piensa que hay alguna de las partes de nuestro contenido (artículo, reportaje, publicidad, etc.) son interesantes. Lo normal es que se centre en estas partes y obvie el resto de elementos que lo rodean. Esta acción de «ir al grano» de la información o la comunicación se conoce en término de marketing como scan.
Reflexión
El artículo interesa al lector, que se para para leerlo con cuidado y extraer sus propias conclusiones, lo que significa para él y que relevancia puede tener tanto a nivel personal como profesional.
Guardar
El contenido que hemos publicado le ha resultado tan interesante que lo ha guardado (en sus favoritos o en texto) para volverlo a leer más tarde.
Transformación
El contenido no sólo le ha interesado, sino que de alguna forma ha cambiado su forma de ver algunas cosas, o ha llegado a tocar sus principios y valores (de forma positiva). En otras palabras, lo que acaba de leer ha producido en nuestro lector un crecimiento personal, una transformación.
Enviar
El lector considera que lo que ha leído no solo es útil para el mismo, sino para alguna de las personas que componen su red social. En este punto, su acción suele limitarse a enviar el link del artículo por correo electrónico, mensajería instantánea, etc.
Promoción
Nuestro lector ha encontrado tan fascinante nuestro contenido que está dispuesto a promocionarlo de forma desinteresada. En este sentido hablará de nosotros con sus conocidos, y puede que haga referencia a nuestra web en su blog o en las redes sociales a las que pertenece.
Suscripción
El último peldaño del feedback positivo y al que todos tenemos que aspirar. Nuestro lector está convencido de que somos capaces de proporcionarle nuevos contenidos que tengan una calidad almenos tan buena como el que le ha hecho suscribirse a nuestra página.
En base a lo cual…
Entender a nuestra audiencia
Amenos que estemos escribiendo únicamente para nosotros mismos, tenemos que focalizar nuestro contenido en el público objetivo de nuestra web. En este punto, podemos hacernos algunas preguntas:
1. ¿Quién es nuestra audiencia?
2. ¿Por qué nos leen?
3. ¿Qué es lo que les preocupa?
Nuestros objetivos
Antes de ponernos a escribir un nuevo artículo, reflexionemos sobre…
1. ¿Cuál es el objetivo del artículo? ¿Qué queremos conseguir?
2. ¿Qué valores queremos crear en el lector que accede a nuestro contenido?
Desatar nuestra creatividad
Si sabemos quiénes forman parte de nuestra audiencia y cuáles son nuestros objetivos, lo siguiente es exprimir nuestra creatividad, de forma que podamos llegar a crear un artículo que responda de forma satisfactoria a los objetivos formulados. En este sentido podemos preguntarnos…
1. ¿Qué necesitamos para hacer un artículo diferente? A veces es una cuestión de contenido, otras simplemente enfoque o incluso de diseño.
2. ¿Cómo podemos hacer que nuestro artículo resulte extremadamente relevante en el momento presente?
3. ¿Cómo podemos aumentar la «longevidad» de nuestro artículo?
Aprender de nuestro Feedback
Ya hemos visto al principio del reportaje las nueve formas en las que puede actuar el lector una vez accede a nuestros contenidos. Cuando las personas actúan de alguna de estas formas, no están proporcionando un importante feedback que nos indica qué es lo que estamos haciendo bien y qué es lo no estamos haciendo como deberíamos. Aprender de nuestra audiencia es probablemente la mejor forma de mejorar.
