Tal y como se esperaba, el Parlamento Europeo ha rechazado dar su aprobación al acuerdo sobre el intercambio de datos bancarios con Estados Unidos mediante la red SWIFT, debido a la preocupación de los eurodiputados por cuestiones como la privacidad, la proporcionalidad y la reciprocidad.
Este rechazo deja sin efecto legal el acuerdo firmado entre Estados Unidos y los 27 Estados miembros, pero no cierra completamente la puerta a la colaboración con Estados Unido, ya que en el marco de la resolución final se propone una nueva negociación.
La resolución de rechazo fue aprobada por 378 votos a favor, 196 en contra y 31 abstenciones. El texto pide a la Comisión y al Consejo que inicien los trabajos de cara a un acuerdo a largo plazo con Estados Unidos. Además, reitera que un nuevo acuerdo debe cumplir las disposiciones del Tratado de Lisboa, en particular la Carta de Derechos Fundamentales.
La ponente parlamentaria, la liberal holandesa Jeanine Hennis ha subrayado que «el Consejo no ha sido lo suficientemente exigente en lo que a la protección de datos se refiere». También ha recalcado que las normas sobre transferencia y almacenamiento de datos incluidas en el pacto provisional no son proporcionales a la seguridad que supuestamente proporciona este acuerdo.
Con el fin de mantener el intercambio de datos financieros con fines antiterroristas, la Unión Europea y Estados Unidos tienen a su disposición el acuerdo sobre Asistencia Legal Mutual, que permite el canje de datos en el marco de la legislación nacional de los Estados miembros.
La Comisión Europea anunció ayer, en una carta al presidente de la Eurocámara, Jerzy Buzek, que adoptará «en las próximas semanas» las líneas generales de negociación del acuerdo a largo plazo. Estos criterios «darán respuesta a las preocupaciones del Parlamento Europeo y del Consejo» y garantizarán «el respeto por la privacidad y la protección de datos».