El Congreso de los Diputados español planea entregar a sus 350 señorías el nuevo smartphone iPhone 4 de Apple. El terminal sustituiría a un modelo HTC de gama alta entregado en 2008 bajo el contrato que la Cámara Baja tiene suscrito con MoviStar para renovación de medios tecnológicos.
Como ocurriera con la información del iPad para eurodiputados las críticas sobre la compra no han tardado en llegar a Internet. ¿Es ética la adquisición del terminal más avanzado del mercado de consumo en estos momentos?
Es entendible y necesaria la modernización tecnológica de nuestros políticos que les ayude a una mejor gestión de todo lo público. Pero con la que está cayendo en medio de recortes laborales y sociales ¿Es ética la compra del último modelo de Apple, símbolo del gran consumo?
Estas y otras preguntas con el mismo enfoque son las que se hacen los internautas en distintos foros y la conclusión de la mayoría es que la adquisición de uno de los terminales móviles más avanzados del mercado no es lo más adecuado en estos momentos como gesto de ahorro por los primeros que deberían dar ejemplo.
Y no ya por dinero. En la práctica MoviStar ‘regalará’ los terminales para mantener y ampliar el contrato corporativo de comunicaciones de paso publicitando sus servicios y el mismo terminal que se pondrá a la venta el mes próximo.
Como ya dijimos cuando se planteó el iPad para eurodiputados (proyecto, dicen cancelado no sabemos si ante las críticas surgidas): ¿Es necesario renovar los terminales cuando los diputados cuentan con móviles-PDA de HTC entregados en 2006 y nuevos modelos en 2008? ¿La renovación debe ser con un último modelo de Apple, máximo símbolo del gran consumo en telefonía móvil? ¿No hay terminales más económicos o plataformas más adecuadas a las necesidades de sus señorías?