Los candidatos a la presidencia de la CEOE, Santiago Herrero, y a la vicepresidencia, el murciano Jesús Banegas, anunciaron hoy que cuentan con el 63% de votos individuales en la Asamblea de la patronal.
En rueda de prensa, apuntaron que esos votos tienen «nombres y apellidos» y confirmaron que el todavía presidente de la organización, Gerardo Díaz Ferrán, no tendrá «absolutamente» ninguna responsabilidad en la CEOE si ganan los comicios, que se celebrarán el próximo 21.
Así lo dijeron hoy tras anunciar su candidatura conjunta que presentaron en un desayuno organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), en el que Banegas avanzó que si consiguen ganar él presidirá la fundación de la CEOE.
Ambos candidatos destacaron la necesidad de una «profunda renovación» de la organización patronal cuyo «prestigio está muy deteriorado» y criticaron que la candidatura de Juan Rosell represente «más de lo mismo».
Según Banegas, Rosell supone que «el presidente actual salga por una puerta y entre por otra», al tiempo que añadió que la candidatura conjunta «no está lastrada por ningún tipo de pactos». Tanto Herrero, presidente de la patronal andaluza CEA, como Banegas, presidente de la patronal tecnológica AMETIC, defienden que Díaz Ferrán apoya la candidatura de Rosell y criticaron que este último tenga un «pacto secreto» con el presidente de CEIM, Arturo Fernández.
Herrero recordó que ellos no han hecho «ningún guiño ni al pasado ni al futuro» y que la candidatura que gestionan no tiene «sectarismos», por lo que conseguirán la mayoría de votos de los 819 componentes de la Asamblea. «Queremos que la CEOE se parezca a una empresa y no a una administración pública», añadió, para que integre a las personas por su valía y «no por el mercadeo de votos».
Ambos afirmaron que podrían haber conseguido «muchísimos» avales en 48 horas pero que «el voto es secreto o no es voto» y que la imagen de que Rosell tiene más apoyo de asociaciones es «ficticia», sobre todo -dijo Herrero- cuando «hay presiones» o se utiliza el nombre de determinadas organizaciones «en vano».