Por contra, el estudio revela que los inversores de Taiwán, Hong Kong, Corea del Sur, Catar y Japón son los que muestran un mayor deseo de autodisciplina financiera.
El estudio, titulado ‘Riesgos y Estrategias: el rol de la autodisciplina en la toma de decisiones financieras’, analiza la conducta financiera de los grandes inversores y parte de la premisa de que el papel que juegan las emociones a la hora de invertir puede costarles a los inversores hasta un 20%.
Según este informe, «es más que probable que sean los patrimonios más altos (más de 10 millones de euros) los que sientan una mayor necesidad de autodisciplina financiera» y señala que el 45% de este grupo busca una mayor autodisciplina en relación a sus finanzas.
En este sentido, el director de conducta financiera de Barclays Wealth, Greg Davies, ha señalado que «muchas personas se sorprenderían al observar que los altos patrimonios son precisamente los que poseen un mayor deseo de autodisciplina financiera, a pesar de que un mayor nivel de riqueza va siempre acompañado de una mayor complejidad en las decisiones de inversión».