«El día de la oficina en casa» se celebra hoy. Con motivo de esta fecha, Microsoft Ibérica en colaboración con el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, la Generalitat de Catalunya, la Asociación Internacional de Partners Certificados de Microsoft en España (IAMCP), la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA), la Fundación Másfamilia, la Fundación ONCE, la Fundación para la Diversidad, Intel, Telefónica, Vodafone, Workplace Innovation Group y la red de Microsoft Innovation Centers en España fomentan el trabajo flexible.
Por el momento, más de 166.000 trabajadores, profesionales y autónomos y cerca de 500 empresas se han unido a «El día de la oficina en casa», una efeméride que, cómo confirma María Garaña, presidenta de Microsoft Ibérica, «es la primera edición pero habrá más en el futuro«. El principal objetivo de esta jornada es demostrar que facilitar a los trabajadores un modelo de trabajo flexible (también llamado por algunos teletrabajo), apoyado en la tecnología, es algo que mejora la productividad.
María Garaña asegura que «España es uno de los países con horarios laborales más extensos y sin embargo tiene la productividad como una asignatura pendiente. Queremos abrir un debate en torno a la posibilidad real del trabajo flexible; las herramientas tecnológicas necesarias existen, están al alcance de todos y los beneficios que aportan son indudables«.
Según muestra un estudio realizado por Vanson Bourne para Microsoft en 15 países europeos a 1.500 personas, un 76% de los empleados que tienen una mayor flexibilidad laboral en España consideran que son más productivos cuando trabajan desde casa (este porcentaje es del 56% en el global europeo). En este estudio se concluye que las pequeñas empresas (con menos de 50 trabajadores) son las que atienden en mayor medida las demandas de sus trabajadores de tener una mayor flexibilidad a la hora de decidir cuándo, dónde y cómo trabajar. En concreto, la cuarta parte de los empleados de las pymes regularmente trabajan fuera de la oficina, mientras que sólo llega al 9% en empresas de más de 500 empleados.
Aunque es difícil medir con exactitud el ahorro de costes que supone para una empresa que sus empleados disfruten de trabajo flexible, los organizadores de «El día de la oficina en casa» calculan que ronda los 1.200 euros por año y empleado. Además, no es el único ahorro que se produce ya que también hay que tener en cuenta que hay un menor consumo de carburantes y que las emisiones de CO2 a la atmósfera disminuyen al evitarse desplazamientos hacia el trabajo.
María Garaña tiene claro que el éxito en la implantación del trabajo flexible pasa porque las empresas hagan frente a dos desafíos: asegurarse de que tienen acceso a la tecnología correcta y crear una cultura empresarial basada en la gestión por objetivos. Precisamente, el cambio cultural puede ser el más complicado de llevar a cabo, ya que solo el 52% de los encuestados por Vanson Bourne confían totalmente en que sus compañeros sean productivos fuera de la oficina.
Más información en www.eldiadelaoficinaencasa.es
