Las organizaciones de autónomos ATA, UPTA y Uatae han expresado su preocupación por el descenso en más de 47.000 cotizantes que experimentó en 2012 el Régimen de Autónomos de la Seguridad Social (RETA). Según Lorenzo Amor, en presidente de ATA, estas cifras reflejan la grave situación económica y de deterioro del tejido productivo experimentada en el último año.
En cuanto al descenso de la afiliación de trabajadores por cuenta propia, tanto ATA como UPTA han destacado que la pérdida total de autónomos durante 2012 ha sido muy superior a la registrada en el conjunto de 2011, cuando el número de autónomos se redujo en 32.579 emprendedores.
Según UPTA, desde abril de 2008, momento en el que el trabajo autónomo crecía a un ritmo interanual del 10%, hasta la fecha se han perdido 381.703 afiliaciones al RETA. Para el secretario general de UPTA, Sebastián Reyna, «lo peor es que no hay ningún motivo para pensar que la evolución de las afiliaciones al RETA vaya a cambiar en los próximos meses, dado que el crédito sigue sin fluir, la morosidad aumenta, la confianza disminuye, y todos los indicadores económicos apuntan a «un invierno muy duro para los autónomos».