Los automóviles europeos deberán contar con un sistema capaz de llamar a emergencias en caso de accidente, indicando la localización exacta del vehículo. Una nueva directiva de la UE obligará a instalar sistemas eCall en todos los vehículos nuevos que se vendan a partir de 2015.
Irán equipados con una solución M2M similar al que ya disponen algunos vehículos de alta gama y que facilitan el acceso y la atención a los heridos, reduciendo el tiempo de respuesta de los servicios médicos y de atención en carretera.
El sistema que conllevará la instalación de una SIM propia en cada automóvil, necesitará además la instalación de sensores especiales capaces de detectar la seriedad del accidente. Es decir, el sistema sólo realizará la llamada cuando se haya producido un choque serio, que afecte de forma determinante a la estructura del habitáculo.
La UE ya había abierto en 2009 un plazo de adopción voluntario para este tipo de soluciones, pero dada la escasa respuesta que ha obtenido por parte de los fabricantes, se ha decidido por acelerar el proceso, resultando el ya citado 2015 como la fecha tope de implantación de las mismas.
Fuentes comunitarias estiman que una vez que el sistema se despliegue en su totalidad, podrían salvarse hasta 2.500 vidas cada año, mejorando el tiempo de respuesta ante incidentes en un 40% en caso de áreas urbanas y un 50% en el medio rural.
eCall puede ser el primer paso en la obligatoriedad de instalar soluciones M2M en los automóviles. Se estima que podría profundizarse en la instalación de nuevos sistemas de seguridad, además de nuevas soluciones que ofrecezcan información en tiempo real en caso de que un vehículo haya sido robado.
