España crecerá por encima del 2,5% en 2016 con independencia de lo que ocurra con el gobierno. Así lo ha explicado este martes la economista jefe del centro de inversiones de Deutsche Bank, Rosa Duce, en la presentación del informe sobre «Perspectivas económicas y de estrategia de inversión para 2016» elaborado por la entidad financiera.
Las previsiones de la entidad bancaria son bastante optimistas, ya que prevé que el crecimiento del PIB español esté por encima de la media europea para 2016 que, según sus estimaciones, se situará en el 1,6%. No obstante, la expansión de la economía española que se inició hace dos años se mantendrá con cifras algo más bajas que en 2015 ante la «pérdida de fuelle» de algunos factores, como la debilidad del euro o el anticipo a julio de las rebajas fiscales, que más han impulsado al consumo en los últimos meses.
Los expertos de Deutsche Bank estiman que la economía europea crecerá un 1,6% en 2016. Según Duce, la debilidad del euro, el impulso del crédito, la menor presión fiscal y la bajada del precio del petróleo apoyarán el crecimiento doméstico. Sin embargo, ha matizado que la crisis migratoria está «presionando los niveles de déficit a corto plazo de los países», lo que puede influir en los datos de crecimiento, pero destaca que puede ser positiva en el medio plazo para Europa porque conlleva un mayor crecimiento poblacional.
Por su parte, el crecimiento mundial para 2016 será del 3,3% y del 3,6% para 2017, según las previsiones de la entidad financiera, aunque la caída del precio del crudo seguirá condicionando las cifras de crecimiento y la FED subirá los tipos hasta tres veces durante este año de forma moderada y dependiendo de los datos económicos. En cuanto a las recomendaciones del banco en materia de inversión, la entidad apuesta por las estrategias multiactivo con peso en la renta variable desarrollada de países desarrollados y la renta fija corporativa.