Las pequeñas empresas son a menudo, las más rápida y ágiles a la hora de adoptar nuevas tendencias digitales. Lo que en una gran compañía puede suponer meses de estudio, programas piloto, implantación y configuración de una solución, en una pyme puede resolverse en cuestión de días. Dicho lo cual, cabe preguntarse qué tendencias digitales tienen más posibilidades de impactar en las pequeñas organizaciones a lo largo de este año.
Gamificación
La gamificación es un proceso que está entrando por la puerta grande de muchas empresas. En primer lugar porque permite establecer una relación más sólida y dinámica con sus clientes, y en segundo término, porque aplicada de forma interna sobre los propios trabajadores, se ha convertido en una gran arma a la hora de motivar, desarrollar nuevas competencias y enfocar a la empresa hacia objetivos concretos y medibles.
Un buen ejemplo de lo anterior es Yomp, una app para dispositivos móviles que tiene como objetivo mejorar la salud de los trabajadores de las pequeñas empresas, estableciendo prácticas de ramificación y motivación, como por ejemplo, premiar por ir al trabajo en bicicleta.
Wearables en la oficina
2014 fue sido el primer año en el que los wearables han empezado a despuntar, principalmente en forma de pulseras que miden nuestro rendimiento físico.
2015 ha sido sin duda, el año en el que el fenómeno smartwatch ha empezado a tomar forma, con dispositivos como el Apple Watch de Apple y un Android Wear más maduro. De continuar esta tendencia, deberíamos ver en un 2016 un uso más intensivo de estos dispositivos en entornos corporativos, toda vez que cada vez son más las aplicaciones empresariales (gestores de tareas, toma de notas, gestión de reuniones, etc.) que se han adaptado a la más pequeña de las pantallas.
Marketing on-line: social media y contenidos
En el terreno del marketing on-line, 2016 va a seguir siendo un año clave para las redes sociales y los buenos contenidos. Las empresas van a seguir apostando por Facebook (y Twitter en menor medida), pero sobre todo, va a ser el gran año para redes sociales hasta ahora menos explotadas comercialmente como Pinterest e Instagram.
En este terreno, las grandes beneficiadas van a ser las agencias de contenidos digitales , capaces de plantear una estrategia 360 en la que se combinen combina la creatividad, la planificación y la analítica tal y como hace por ejemplo Marketing Paradise.
La empresa, especializada en marketing de contenidos, redes sociales, posicionamiento web o el diseño de campañas de publicidad on-line, lleva más de ocho años trabajando con clientes de todos los tamaños desde su agencia digital en Madrid.
Big Data y personalización en la experiencia de compra
Se multiplicarán las herramientas que permiten analizar los datos de compras anteriores de los clientes, las campañas que han visto, los emails que han abierto, las apps que han descargado… para incluir a los visitantes en un segmento o atribuirles un perfil para ofrecerles contenido personalizado.
Las empresas lucharán por proporcionar experiencias de compra únicas, adaptadas a los gustos de cada usuario. A medio plazo, incluso podríamos asistir a escenarios es que también el precio que pagamos por un producto, varía en función de quién lo compra, llegando así a escenarios de personalización máxima.
2016, ¿El año de los pagos móviles?
Si todo va como parece, 2016 debería ser un año crucial para el despegue de los pagos móviles en España. Ante la inminente llegada de Samsung Pay, en la segunda mitad del año veremos cómo de forma oficial Apple Pay (y tal vez también Android Pay) aterriza en nuestro país.
Junto a los actores tecnológicos, entidades financieras como Caixabank o BBVA están poniendo todo de su parte para que esta vez sí que sí, en 2016 los pagos móviles dejen ser una exclusiva de early adopters para convertirse en una alternativa válida para la mayoría de los usuarios.
Economía on-demand
Tras fenómenos como Uber, Airbnb o Blablacar, tenemos que prepararnos para un nuevo año en el que la gran protagonista va a ser la “economía on-demand”. Los consumidores van a querer controlar cualquier aspecto de su vida diaria desde su teléfono móvil y cada vez más, van a apostar por ese “consumo colaborativo” que hace unos años ha empezado a abrirse paso en nuestra sociedad.
Vamos a ver como paulatinamente desaparecen intermediarios a la hora de realizar tareas domésticas, realizar la compra diaria, realizar una excursión cultural o incluso trabajar.
Veremos cómo surgen nuevas plataformas para la nueva economía “on demand” y la tecnología va a ser la gran protagonista a la hora de conectar consumidores con proveedores de servicios, e incluso, dispositivos conectados a Internet como el caso de los nuevos servicios de car-sharing.
