Pese a ser uno de los grandes inversores de Uber, en Google no quieren asistir al fenómeno del ridesharing como simples espectadores. Tras la adquisición de Waze la compañía puso en marcha un pequeño programa piloto que aprovechaba la estupenda aplicación recién adquirida, para experimentar con el carpooling para algunos empleados.
Ahora Google quiere dar un paso más y extenderá su programa a toda la ciudad de San Francisco. Eso sí, la propuesta no se solapa sobre la de Uber sino que centra su foco de acción en la movilidad de los trabajadores desde y hacia su centro de trabajo.
Gracias a la colaboración con las empresas que quieran sumarse al programa, el programa Waze de Google permitirá que los trabajadores que compartan una ruta similar, puedan compartir coche, ahorrándoles de esta forma sus costes de movilidad.
De esta forma, Google anima a las empresas a introducir dentro de sus políticas RSE programas de movilidad sostenible que sirvan para ahorrar costes, descongestionar el tráfico y contaminar menos.
A medio plazo, no sería de extrañar que este tipo de desplazamientos corriesen a cargo de los coches autónomos de la firma californiana, dado que tal y como os comentamos hace unos días, el desarrollo el vehículo inteligente está hoy mucho más cerca de convertirse en realidad.