Probablemente no pero la realidad es que los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística no son nada positivos para el tejido empresarial español. En el mes de junio el número de nuevas sociedades mercantiles descendió un 10,3% en relación al mismo mes de 2016. Este es ya el tercer mes consecutivo de retrocesos interanuales: en abril la cifra cayó más de un 18% y en mayo un 0,3%.
La mayoría de las enseñas que han visto la luz se dedican al comercio y a actividades inmobiliarias, financieras y seguros. El otro lado de la moneda es el de los negocios que han cerrado sus puertas, en su mayoría comercios y enseñas del sector de la construcción.
El mes de junio se han constituido 8.334 compañías que suscribieron un capital de más de 525 millones de euros. Esto sí supone un incremento notable en relación al mismo periodo del ejercicio anterior, hasta un 28,5% más. El capital medio suscrito ha estado en 63.011 euros, un 43,4% más de incremento interanual.
El cierre de negocios se han hecho en una mayoría de manera voluntaria. También se han fusionado empresas con otras sociedades y existe un 18,5% restante que apunta a “otras causas” para la disolución de las enseñas.
Las comunidades autónomas que están protagonizando la mayoría de estas aperturas de junio del año 2017 son Madrid, Cataluña y Andalucía, todas ellas por encima de las 1.300 nuevas sociedades fundadas. En el lado opuesto están La Rioja, Navarra y Cantabria, que son las regiones donde menos firmas vieron la luz en el citado periodo.
Las comunidades que presentan un mayor número de disoluciones fueron Madrid, Andalucía y Cataluña. Las que registraron menos sociedades mercantiles fueron Navarra, Cantabria y La Rioja.
Esperemos que se vaya recuperando la tónica anterior y poco a poco se vuelva a la senda del crecimiento en lo que a puesta en marcha de iniciativas empresariales se refiere.
