El fabricante japonés de equipos electrónicos Pioneer eliminará 10.000 puestos de trabajo en todo el mundo, de los que 6.000 serán empleados fijos y 4.000 temporales, tras sufrir pérdidas de 79.125 millones de yenes (685 millones de euros) en los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, frente al beneficio neto de 11.624 millones de yenes (101 millones de euros) del mismo periodo del año anterior, informó la empresa.
Los recortes de plantilla se enmarcan en la profunda reestructuración que llevará a cabo la compañía nipona, por la que planea abandonar la fabricación de pantallas de televisión y centrarse en el negocio de productos electrónicos para el automóvil.