La deducción por I+D+i en el Impuesto sobre Sociedades se mantendrá más allá de 2011, año en el que el Gobierno se había comprometido a analizar su mantenimiento o su eliminación definitiva. En este sentido, la decisión del Gobierno ha sido la de mantener esta deducción de forma permanente.
Aunque en la última reforma del Impuesto de Sociedades se ha optado por eliminar de forma progresiva la mayoría de las deducciones, se había desatado una fuerte polémica sobre la posible desaparición de la deducción por investigación.
Así las cosas, el departamento de Pedro Solbes ha decidido, junto con el Ministerio de Ciencia y Tecnología, mantener la citada deducción que, según los últimos datos del Ministerio de Economía y Hacienda, beneficia a más de 3.200 empresas por un importe de 317 millones de euros.
Carlos Ocaña, secretario de Estado de Hacienda, indicó al respecto que el Gobierno ha decidido ya extender este incentivo más allá de 2011 para «evitar la incertidumbre» sobre su posible desaparición que puede generar en las empresas que se están aplicando la citada deducción. Para ello, la intención de Hacienda es aprobar en «un futuro próximo» una modificación de la actual normativa del Impuesto sobre Sociedades.
Ocaña apuntó que lo que no está en la agenda del Ministerio de Hacienda es aplicar una rebaja del Impuesto sobre Sociedades como demanda tanto la patronal como el principal partido de la oposición. En su opinión, con un déficit público como el actual, que se situó en el 3,8% al cierre de 2008, «no es responsable» acometer una rebaja del mismo. «Eso aumentaría el déficit y nosotros queremos mantener el gasto social y las prestaciones por desempleo», precisó.
Tampoco se mostró partidario de bajar de forma generalizada las cotizaciones sociales y compensar esta reducción con un incremento del IVA, precisamente en un momento en el que la demanda interna está en caída libre. «(A esta propuesta) le veo serios inconvenientes, porque bajar cotizaciones puede poner en riesgo las finanzas de la Seguridad Social y por esa razón no me gusta», finalizó.
