En el marco de la Small Business Act, el parlamento europeo aprobó ayer un informe en el que se solicita que los países miembros de la UE armonicen los pagos de las adminitraciones públicas a las pymes, para evitar que sean ahogadas por los problemas de crédito y financiación.
En este sentido, los europarlamentarios han pedido el desarrollo de una ley vinculante para todos los estados miembros de la unión que, entre otras ventajas, simplifique en más de un 25% la burocracia de estas compañías.
Esta iniciativa establece diez principios guía para favorecer y promover a las pymes, tanto en el ámbito comunitario como en de los Estados miembros. Entre otros aspectos, los parlamentarios solicitan que se armonice a nivel europeo el plazo de que disponen las administraciones públicas para pagar a este tipo de sociedades, especialmente cuando «la actual contracción del crédito puede afectar desproporcionadamente a las pyme».
Este plazo podría ser más breve que respecto otro tipo de compañías y su incumplimiento conllevaría sanciones. En este sentido, recuerda que, en uno de cada cuatro casos, la quiebra de estas compañías se debe a la morosidad, mayoritariamente por parte de las administraciones públicas. Por otro lado, la resolución lamenta que la Ley de la Pequeña Empresa (Small Business Act) carezca de carácter vinculante, y considera que el principio de «pensar primero a pequeña escala» (think small first) debería establecerse como una norma obligatoria para la futura legislación europea .
El documento aprobado también considera «imprescindible» que se reduzcan como mínimo un 25% los trámites burocráticos de estas sociedades, a través de una fiscalidad que facilite el inicio de su actividad y fomente la innovación e inversión. El documento pide también a los Estados miembros que «examinen atentamente» su régimen jurídico y fiscal, para facilitar la transmisión de este tipo de empresas, sobre todo en casos en que el propietario se jubile o padezca una enfermedad.
Más protección a sus patentes
Como colofón, otro de los puntos en los que inciden los europarlamentarios es en la importancia de facilitar el acceso de los pequeños empresarios a la protección de sus patentes. Por ello, anima a que se llegue «rápidamente a un acuerdo sobre una patente comunitaria que garantice una protección jurídica poco onerosa, eficaz, flexible y de gran calidad, adaptada a las necesidades de las pymes».