A pesar de las filtraciones que en las últimas semanas apuntaban a un relevo en la dirección del ICO, la nueva vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, ha ratificado en su puesto al hasta ahora presidente de este organismo, Aurelio Martínez.
Martínez había recibido duras críticas desde la oposición, fundamentalmente por la falta de financiación de pymes y autónomos, y sobre todo, por la lentitud con la que se estaban concediendo los créditos del Instituto.
Con esta ratificación, Salgado a apostado por mantener al actual jefe del ICO en su puesto a pesar de las críticas que ha recibido este organismo público también por parte de las principales confederaciones empresariales y organizaciones de autónomos que hace unas semanas se manifestaron frente al Congreso de los Diputados para exigir nuevas medidas de financiación.
Además, esta ratificación se produce después de que Salgado reclamara a la banca, durante su primer discurso en la toma de posesión del cargo, que, al igual que ha mostrado fortaleza ante la crisis, la utilice con «rigor» y «prontitud» para ayudar a «superar las dificultades de familias, autónomos y pequeñas y medianas empresas» con la concesión de crédito.
En los últimos tiempos, el ICO se ha convertido en el principal instrumento de lucha contra la crisis adoptado por el Gobierno, con el que el Gobierno está intentando centralizar las ayudas en forma de avales y créditos a las familias, las pymes y las entidades financieras.