Únicamente el 9,6% (0,7 puntos menos que hace un año) de las empresas españolas tiene un alto riesgo de morosidad, o lo que es lo mismo: muchas posibilidades de no cumplir con sus obligaciones financieras durante este año.
Esa bolsa de máximo riesgo está formada por las empresas (fundamentalmente del sector de la construcción y afines y el transporte) que ya son morosas o tienen una probabilidad superior al 70% de comenzar a generar impagos en sus relaciones comerciales a lo largo de los próximos doce meses.
Hace un año, el mismo estudio que hoy se presenta, elaborado por Iberinform, situó al 10,3% de las empresas en esa zona de alto riesgo, lo que supone una leve mejoría en las previsiones de morosidad empresarial motivada por la evolución y adaptación del tejido productivo en el nuevo entorno y la implementación de mayores controles de gestión del crédito al cliente.
El análisis por comunidades autónomas muestra grandes diferencias, donde las empresas situadas en el Sureste de España presentan las mayores probabilidades de impagar durante el próximo año, junto con Galicia. Únicamente tres comunidades autónomas se sitúan por debajo del 4%, y son Cantabria (3,8%), La Rioja (3,3%) y Navarra (2,4%). Por sectores de actividad, la concentración de empresas con un alto riesgo de incumplir sus compromisos de pago es mayor en el sector construcción y afines, como actividades inmobiliarias y de alquiler, seguidas del sector transporte.
El director general de Iberinform, Andrés Ohlsson, advierte de que en estos momentos las empresas deben prestar especial atención a la situación financiera de sus clientes y controlar estrechamente las ventas de aquellos con mayor nivel de riesgo de impago.
