En España, el 90% de las empresas recibe actualmente los pagos con retraso, lo que ha provocado que el riesgo de las operaciones comerciales se haya incrementado en siete puntos respecto a 2008, según el estudio «Índice de riesgo de pago 2009» presentado por Intrum Justitia.
Los retrasos en los pagos se incrementaron en un promedio de 10 días respecto a 2008. Las pérdidas por impago sobre el total de facturación en España aumentaron del 2,2% en 2008 al 2,4% actual.
El plazo de pago en España se sitúa en 98 días de media, frente al promedio europeo de 57 días, y vuelve a ocupar el segundo puesto por detrás de Grecia. Los particulares son los que menos retrasan los pagos, con 17 días de media, efectuando sus pagos en una media de 57 días, frente a la media europea de 41 días.
Además, el 82% de los empresarios españoles opinan que el riesgo de impago seguirá incrementándose a lo largo de este año, frente al 40% de registrado en 2008. En este sentido, el 67% de las empresas prevé pérdidas a consecuencia de los impagos y el 78% teme que afecte a la liquidez de su empresa.
9.300 millones de liquidez
Otra de las conclusiones que se desprenden del informe es que las empresas españolas recibirían 9.300 millones de euros de liquidez inmediata si las administraciones públicas (Estado, comunidades autónomas y ayuntamientos) pagaran sus facturas en los plazos indicados.
La Administración española tarda 139 días de media en pagar a sus proveedores, frente a los 67 días de media europea, y se sitúa en el segundo puesto sólo detrás de Grecia, cuyos organismos públicos tardan una media de 165 días en pagar. Por detrás, se encuentran Italia, Portugal y Chipre.
En conjunto, si todas las administraciones públicas europeas pagaran sus facturas dentro del plazo estipulado se produciría una inyección de 65.000 millones de euros.