El turismo, uno de los grandes motores de la economía española y que supone el 11% del Producto Interior Bruto, sufrirá este verano las consecuencias de la crisis global y se calcula que este año almenos un 10% de turistas extranjeros dejarán de visitar nuestro país.
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha señalado que en la temporada estival vendrán a España 23,3 millones de turistas extranjeros, lo cual se debe a que los países emisores también sufren la crisis.
Además, ha destacado que el gasto turístico global ha disminuido menos que el número de turistas, lo que, en su opinión, implica que los turistas que apuestan por España tienen más poder adquisitivo.
De la Vega ha resaltado la decisión del Consejo de este viernes de sumar 600 millones de euros al Plan Renove Turismo puesto en marcha en enero con una dotación de 400 millones de euros (ya agotados y que ha generado unos 15.000 empleos), y que se ha aumentado como consecuencia de la «confianza financiera» en el sector y a que la principal demanda es la modernización de las infraestructuras turísticas.
El objetivo, ha asegurado la vicepresidenta, es mejorar el nivel de calidad, el atractivo de la oferta y animar la inversión. Según la vicepresidenta, el Plan servirá para mantener el liderazgo que ostenta el turismo español en todo el mundo.