El sector TIC cerró 2009 con una caída del 8% en su cifra de negocio, con lo que entra en terreno negativo por primera vez desde los primeros años de la década de los noventa, y facturará en torno a un 2,5% menos este ejercicio, según las previsiones «más optimistas» de Asimelec.
De hecho su presidente, Martín pérez, ndicó que esta caída global del 8%, que en algunos sectores alcanza el 20%, está muy por encima de las previsiones barajadas por la patronal el pasado año, que apuntaban un crecimiento cero del sector para 2009.
Por áreas de negocio, la facturación en Telecomunicaciones cayó un 6%, en Software y en Servicios Informáticos descendió un 5,2%, en Audiovisual disminuyó un 24%, en Internet y Servicios de Información un 3,5% y en Electrónica de Consumo bajó un 22%, según las cifras preliminares de la asociación.
Según el directivo, las estimaciones de la asociación de hace un año cuando el sector «seguía en alza», a pesar de la crisis, se han trocado en «honda preocupación». «El consumo sigue bajo mínimos y existe una contradicción entre el mensaje del Gobierno y su apuesta por el sector y la práctica», afirmó Pérez, quién añadió que 2010 será «crítico» si se persiste en el recorte de la inversión pública.
En este sentido, el presidente destacó que mientras que la patronal calcula una pérdida de negocio del 2,5% para este ejercicio, siempre que no caiga más la demanda empresarial a escala internacional, los expertos prevén un incremento del 4,5% en la zona EMEA (Europa, Oriente Medio y África).
Para el directivo, esta diferencia entre el sector TIC en España y sus homólogos de otros países responde a la «situación especial» de la economía española y a una «falta de atención» por parte del Gobierno, que apenas considera a las TIC en su Ley de Economía Sostenible y que ha recortado el presupuesto destinado al Plan Avanza.
«Es necesario que en España se apueste por las tecnologías de la información y la comunicación y se fomente el desarrollo de la Sociedad Digital, porque son elementos clave para mejorar la productividad, la innovación y la calidad de vida», destacó Pérez.
