Pues bien, casi 30 años después del lanzamiento de estos disquetes y de que la decisión de Sony deje en entredicho su futuro, Verbatim asegura que el uso de éstos como soportes de almacenamiento continúa siendo muy extendido y que ni muchos menos el disquete está «muerto». 
El otro día os contamos que Sony, el principal fabricante de disquetes de 3,5 pulgadas del mundo, con un 70% de la producción en su poder, iba a dejar de comercializarlos a partir de marzo de 2011.
e acuerdo con las cifras de Verbatim, las ventas de disquetes de 3,5 pulgadas en Europa fueron de 50 millones de unidades. Además, confirma que la demanda ha sido especialmente alta en los países del este y en las ex repúblicas soviéticas. En España se vendieron en 2009 alrededor de 500.000 unidades de este producto y en 2010, «el disquete todavía se utiliza en una amplia gama de aplicaciones y es especialmente fácil de usar para almacenar pequeñas cantidades de datos y, además, es barato«, todo esto según Verbatim.
El parque de ordenadores con disquetera es todavía lo bastante grande para que este formato se siga utilizando tanto en la esfera doméstica como en la profesional, incluyendo organismos de la administración pública e industria. Por tanto, la demanda permanece constante, asegura Verbatim, que garantiza que en 2010 los usuarios españoles continuarán encontrando disquetes en los lineales de las tiendas de electrónica de consumo.
