El último escándalo ha sido el que ha afectado a Adidas, empresa que había firmado un acuerdo por valor de 10 millones de dólares para una campaña en iAd y que finalmente se ha retirado de esa negociación. 
La aparición del servicio iAd de publicidad en dispositivos y servicios de Apple está teniendo un éxito muy discreto, y de hecho están comenzando a surgir las críticas sobre el excesivo control que Steve Jobs quiere imponer en las campañas publicitarias que contratan los anunciantes.
Según Business Insider, Adidas ha abandonado la campaña porque Steve Jobs es «un fanático del control«, según han indicado fuentes cercanas a las negociaciones. La empresa de ropa y accesorios deportivos había acordado poner en marcha una lucrativa campaña de 10 millones de dólares en iAd, la nueva plataforma publicitaria de Apple.
Sin embargo la empresa ha cancelado el contrato tras conocerse que Apple había rechazado las propuestas creativas de Adidas tres veces seguidas. Al parecer Jobs está demasiado encima de esta plataforma y de las creatividades publicitarias, y si algo no le gusta no deja que dicha publicidad sea distribuida por su plataforma.
Esa actitud controladora ha provocado que otras agencias también tengan diferencias con Apple en este campo, y eso ha provocado que el despegue de la plataforma iAd haya sido especialmente lento.
Los anunciantes se quejan del control inusual que Apple ejerce sobre la creatividad, pero también sobre la falta de control y de visibilidad sobre dónde aparecen sus anuncios, la falta de herramientas de terceras partes y otros problemas, algo que podría condenar el futuro de iAd.
