Camareros, maítres y empresarios del ocio nocturno escenificaron ayer en Madrid, en la sede del Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, su rechazo a la nueva normativa antitabaco que a partir del 1 de enero prohibirá fumar en cualquier espacio público.
Esta protesta estaba organizada por la asociación de empresarios de locales de ocio de la Comunidad de Madrid Noche Madrid. Para ello empresarios y trabajadores mostraron a través de una performance su disconformidad con la Ley.
«A un supermercado se va a comprar, a un autobús a viajar y a un bar o restaurante se va a disfrutar, son establecimientos diferentes», afirmó el presidente de la Asociación de Maitres y Camareros de España (AMYCE), Mariano Castellanos. También recordó que, al igual que en otras profesiones, cuando alguien decide ser camarero sabe qué va a tener que atender a clientes fumadores.
Asimismo, lamentó que desde el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad no hayan contado con la asociación, que agrupa a más de 5.000 trabajadores del sector de la hostelería de toda España. «Creen que nos van a salvar la vida porque no se fume en los establecimientos», ha afirmado Castellanos, para quien fumar es una actividad directamente relacionada con los servicios de ocio.
A su juicio, se está haciendo un flaco favor a la economía del país, ya que «España es un país de servicios, es el segundo país turístico, y los turistas no viene sólo por ‘sol y playa’, también vienen porque hay unas libertades como poder fumar en los establecimientos de ocio».
Desde AMYCE recuerdan que esta nueva ley puede provocar la eliminación de entre 100.000 y 150.000 puestos de trabajo de un sector que, según explicó, en los tres últimos años «ha visto reducido su poder adquisitivo, trabajando las mismas horas, y su calidad de vida». «Ya hay muchos profesionales que están en el paro», aseguró Castellasnos.