Antes de recurrir a los típicos descuentos, promociones y rebajas, hay una serie de estrategias que pueden llevarte a incrementar el volumen de negocio. Estas responden a los nuevos perfiles del consumidor. Han cambiado sus necesidades y también la forma en la que se llega a ellos.
Así, entre los principios del marketing del futuro –y ahora del presente- la primera pauta a seguir es apelar a los deseos, no a las necesidades. Actualmente, son más frecuentes las compras por impulso y de ahí que cuando diseñemos acciones de venta hemos de cambiar el chip. Para ello, hay que ponerse en la piel del comprador y preguntarse qué siente, que le motiva a optar por tu marca en lugar de por otra.
En segundo lugar, está la formación de tu plantilla, de tu equipo de ventas. Hay que ayudarles a vender, integrarlos en la empresa, motivarlos y darles las herramientas necesarias para optimizar sus cualidades comerciales, en unos más innatas que en otros. Para ello, centrarse en las fortalezas de cada uno es importante e intentar paliar las debilidades como vendedor potenciando las primeras.
A continuación, la política de precios. Esta ha de ser clara, sin medias tintas para que el consumidor no se sienta engañado por la compañía si, cuando se acerca al establecimiento o a tu web a adquirir un bien o servicio ve que el precio final no era el prometido, o que hay cláusulas –la letra pequeña- que no había contemplado.
Abrir nuevos canales de venta. Este cuarta clave, a pesar de haberse hablado mucho de ella,sigue sin ser explotada por muchas empresas, especialmente pymes, que consideran que no hay nada más allá de la venta tradicional, del cara a cara. Sin lugar a dudas, internet ha venido a revolucionar la forma de hacer negocios y el empresario debe ser consciente de ello. No todas las actividades pueden sacar rentabilidad del e-commerce, pero al menos hay que planteárselo y estudiar si la estrategia de comercio electrónico podría ayudarte a sacar mayores beneficios en estos tiempos de crisis.
Por último, en línea con el punto anterior, ábrete al mundo, lleva a tu empresa más allá de tu frontera local, regional e incluso nacional y saca partido del negocio en el mercado exterior. Si bien a priori puede parecer más difícil vender fuera de España, actualmente el mercado internacional puede ser más fácil de abordar, puesto que está menos golpeado por la crisis que el nuestro.