Según un estudio del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), la red bancaria en España debe reducirse en un 35% en los próximos tres años, hasta quedarse en unas 25.000 oficinas. El 30% de las oficinas en España genera el 70% del negocio, lo que pone de manifiesto la existencia de un importante excedente de sucursales, sostiene el IEB.
Tal y como argumenta el informe: «No tiene ningún sentido que España sea el primer país del mundo con más oficinas por habitante, cuando ni siquiera estamos entre las diez potencias mundiales». El estudio también señala, que la necesidad de suprimir parte de la red comercial del sector financiero puede ser incluso superior al 35% en función de los efectos de la crisis económica y del mapa definitivo que surja de la reestructuración bancaria en marcha.
Lo cierto, es que este sobrante tendrá efectos en el empleo dentro del sector. De hecho, incluso, según el informe del IEB, la reforma financiera en España dará lugar a que sólo acabe habiendo una decena de grandes entidades.