Mucho ha cambiado desde que en 1880 se desarrolló el primer preservativo a base de tripas de animales. Pero más allá del uso del látex y la introducción de novedades ergonómicas y químicas, la base y el uso de profiláctico se ha mantenido inalterada hasta nuestros días. Ahora una pequeña empresa que responde al sugente nombre de «Galactic Cup» quiere hacer historia cambiando para siempre el mundo del preservativo.
La empresa ha desarrollado para ello un nuevo condón, en que el se apuesta por el minimalismo extremo. El nuevo preservativo únicamente cubre la parte superior del pene, asegurando según sus inventores, un mayor placer para el hombre, a la vez que se sigue manteniendo la seguridad a la hora de evitar embarazos no deseados. Además según sus promotores el nuevo diseño permite una mayor velocidad a la hora de colocar el «dispositivo».
En realidad los preservativos Galactic Cup, que actualmente buscan financiación en Indie Gogo, constan de dos partes: una base, que en modo de adhesivo puede aplicarse horas antes de mantener una relación sexual, y una segunda parte o capucha (de ahí lo de Cup) se se pone en el «momento adecuado».
Todo el proyecto parte del empeño personal de Charles Powell, un emprendedor que podría tener en sus manos el futuro del preservativo. Pero tal y como nos cuentan en Gizmodo, el proyecto todavía tiene algunos obstáculos que superar si quiere triunfar. El principal es que aunque las autoridades médicas americanas han aprobado que el uso de la base es seguro, todavía no está demasiado clara la capacidad de la «capucha» para evitar enfermedades de transmisión sexual, aunque sí que parece efectiva como método anticonceptivo.
En cualquier caso, es una prueba de que incluso en un sector tan «tradicional», se puede innovar de forma disruptiva y que no hay que ser una gran compañía para poder hacerlo. Una compañía que en definitiva, podría participar en nuestros premios Small&Smart