El nuevo Android 5.0 Lollipop incluye de serie una de las funcionalidades que sin lugar a dudas, serán más aplaudidas por usuarios y empresa: Kill Switch (Factory Reset Protection). La nueva característica permite en caso de que un smartphone haya sido robado, que el usuario no sólo pueda localizarlo o borrar los datos en remoto (esta función ya fue presentada el año pasado) sino volver el smartphone inutilizable incluso si se cambia la tarjeta SIM.
Kill Switch «pide» al ladrón de nuestro terminal que introduzca una contraseña en particular (definida por nosotros). En caso de fallar al hacerlo, el smartphone se convertirá automáticamente en un portapapeles de diseño con el que no podremos hacer absolutamente nada a menos que introduzcamos la contraseña adecuada.
La introducción de esta nueva característica responde a una petición del gobierno del estado de California, que establece que a partir del próximo mes de julio, todos los terminales que se vendan en esa región deberán contar con una función similar. La introducción de esas medida favorece al resto de usuarios del mundo y especialmente a las empresas que de esta forma podrán bloquear y borrar el contenido de los terminales robados de una forma mucho más sencilla, impidiendo además su reventa en el mercado de segunda mano.
Además de Android 5.0, Google presentó ayer de forma oficial su smartphone Nexus 6 y su nueva tablet Nexus 9, que además son los primeros terminales que presentarán esta característica.
