La Agencia Estatal de Seguridad Aérea, dependiente del Ministerio de Fomento español, ha aclarado que los pasajeros sí podrán llevar sus teléfonos móviles, tabletas y ordenadores personales en las maletas facturadas en bodega de los aviones. La aclaración del organismo llega después de que la Organización de Aviación civil Internacional (OACI) anunciase que las aeronaves comerciales no podrán transportar ningún «cargamento» de baterías de litio.
El consejo rector de la OACI, en el que están representados 36 países, entre ellos España, asegura que esta medida había sido una petición recurrente desde los diferentes agentes del sector (empresas y pilotos) por motivos de seguridad. A partir de 2018 está previsto que se establezcan nuevas normas sobre el transporte de baterías de litio. El riesgo de transportar baterías de litio reside, siempre según el organismo internacional, en un potencial incendio derivado del sobrecalentamiento de las baterías de litio.
En los últimos años se han detectado varios casos de explosiones que han puesto en peligro la seguridad aérea. Así un Boeing 787 de la compañía japonesa All Nippon Airways que cubría una ruta entre EE UU y Japón sufrió en enero de 2013 dos incendios en la bodega, a causa del sobrecalentamiento de las baterías de varios de los dispositivos que transportaba y esto obligó al piloto a realizar un aterrizaje de emergencia.