La operadora de telecomunicaciones invertirá hasta 21,4 millones de euros para responder al incremento de tráfico que se da en esta época del año en las localidades de mayor interés turístico. Orange ha detectado un importante crecimiento del tráfico en su red por lo que considera clave fortalecer los sistemas para dar respuesta a las necesidades del momento. Es clave en todo ello la eliminación de los cargos por itinerancia móvil. La nueva normativa de la Unión Europea sobre roaming está haciendo que cada vez se utilice más internet y se navegue y eso repercute en los riesgos de sobrecarga de redes.
“Los visitantes extranjeros podrían incrementar su perfil de uso este verano hasta en un 132% y el tráfico de roaming en los destinos turísticos se podría multiplicar por cuatro en relación a 2016”, explican desde la operadora. De ahí que Orange esté desarrollando un plan para intensificar el 4G en municipios de perfil vacacional. Ha desplegado 246 nuevas estaciones 4G y está llevando a cabo una serie de ampliaciones de sus infraestructuras de cuarta generación instaladas en años anteriores.
El plan va a afectar a 222 estaciones de su red. El objetivo no es otro que garantizar los niveles óptimos de servicio habituales en poblaciones consideradas objetivo turístico.
Las novedades que está llevando a cabo la operadora no terminan aquí. La normativa del roaming, como ya apuntábamos, introduce numerosos cambios y va a incrementar de manera notable el uso que se realiza de los dispositivos móviles. Orange está desarrollando un proyecto valorado en 11,6 millones de euros y la idea es redimensionar la red. Se quiere dar respuesta de manera eficiente y eficaz a la demanda adicional que se está produciendo en estos momentos.
El plan de Orange contempla la asignación de más canales de tráfico donde los clientes lo requieren para absorber estos incrementos de tráfico. De esta manera se asegura el mantenimiento de la calidad del servicio.