Este gigante empresarial de nuestro país está creciendo a un ritmo muy acelerado. El comercio electrónico le está dando muchas alegrías a El Corte Inglés, que ha aumentado su volumen de negocio en la red un 40% durante 2016. Esto ha provocado que la compañía crezca a un ritmo que duplica la velocidad a la que está evolucionando la economía española.
Dimas Gimeno, presidente del grupo, ha señalado que para ellos “el comercio electrónico ha dejado de ser el futuro. Es ya el presente y lo encaramos con determinación, energía y con una ambición: llevar al mundo ‘online’ los mismos principios de surtido, especialización, calidad, servicio y garantía que han distinguido a El Corte Inglés a lo largo de la historia”. Han conseguido que el tráfico de la web suba un 25% y durante el pasado ejercicio alcanzó los 8,5 millones de usuarios registrados.
La empresa dice no temer a competidores tan fuertes como Amazon. “Son dos negocios completamente diferentes y hay cosas que Amazon no puede hacer y nosotros sí”, apunta Gimeno. El Corte Inglés debe aprovechar “sus fortalezas” y por el momento la idea que tienen no es, al menos de momento, firmar una alianza del tipo a la que han firmado Wallmart y Google.
La compañía afirma que la omnicanalidad es el “gran desafío” tal y como sea plantea el sector de la distribución. “No hay otro reto más sugestivo ni más urgente que enlazar la tienda tradicional con los canales electrónicos. Es decir, integrar las tiendas físicas y el mundo online”, ha explicado el presidente del grupo durante la junta de accionistas.
Gimeno explica que la firma está concentrada en mejorar su oferta de servicios y su propuesta comercial. La meta no es otra que seguir haciendo que El Corte inglés sea un lugar “de compras atractivo y de plena satisfacción para el cliente, optimizar los procesos internos y los recursos, dedicar importantes inversiones a la innovación y las nuevas tecnologías y avanzar en la transformación digital de la compañía”, sentencia Dimas Gimeno.