Alrededor de 82.000 millones de euros gastarán las empresas en seguridad a nivel internacional el próximo año. Así lo apuntan las previsiones que maneja la consultora tecnológica Gartner, que destaca cómo esta partida presupuestaria aumentará un 8% en el ejercicio 2018. Gartner destaca que las compañías están gastando cada vez más en sistemas de seguridad para conseguir una mejoría en la regulación, promoviendo un cambio de mentalidad en los compradores y concienciando sobre las amenazas emergentes que se están generando. Reseñan que en el mundo digital cada vez son más los riesgos a los que se exponen los negocios y hay que invertir para evitar los daños que los ataques puedan causar.
Ruggero Contu, director de investigación de Gartner, señala que “gran parte del gasto en seguridad está motivado por una reacción de las empresas a las brechas de seguridad a medida de ciberataques de alto nivel y filtraciones de datos que afectan a enseñas de todo el mundo”. Se ha referido a WannaCry y NotPetya como ejemplos recientes y a lo ocurrido con Equifax. Todo ello, según Contu, ha tenido un “efecto directo” en el gasto en seguridad pues este tipo de incidentes suelen tener una duración de hasta tres años.
Dentro de las inversiones en seguridad, las secciones donde más se va a destinar capital son los campos de protección de infraestructuras y de servicios de seguridad. Se realizarán mayores esfuerzos para pruebas de seguridad, externalización de Tecnologías de la Información (TI) y gestión de información y eventos de seguridad.
Ruggero Contu ha explicado durante la presentación de estos datos que el cumplimiento de las exigencias regulatorias y la privacidad de los datos ha estimulado parte del gasto en seguridad de los últimos ejercicios, especialmente en Estados Unidos. Europa y China probablemente verán cómo aumentar esa partida presupuestaria cuando entre en vigor el Reglamento General de Protección de Datos de la Unión Europea (RGPD) en el Viejo Continente y en el gigante asiático.
