Utilizar una impresora de forma eficiente para conseguir una buena experiencia puede resultar, en la mayoría de los casos, algo muy complicado, sobre todo si queremos ahorrar y aportar nuestro granito de arena al cuidado del medio ambiente. Todas esas complicaciones no surgen de la propia impresora, sino de sus consumibles, los cartuchos de tinta.
Cuando imprimimos, los cartuchos de tinta influyen enormemente en aspectos tan importantes como la calidad de impresión, el coste por página, la sostenibilidad y los tiempos de inactividad. Su importancia está fuera de toda duda, y por ello es muy importante que tengamos sumo cuidado a la hora de elegir los cartuchos que vamos a utilizar en nuestra impresora.
Por otro lado, también debemos moderar el consumo de tinta. Si imprimimos mucho en color y con calidad alta, acabaremos gastando los cartuchos con rapidez, y tendremos que hacer frente a unos costes de impresión muy elevados. Al mismo tiempo, es fundamental controlar los niveles de tinta y asegurarnos de ir a comprar nuevos cartuchos antes de que se agoten los que estamos utilizando. De lo contrario, nos veremos sin tinta en el peor momento posible, y tendremos un tiempo de inactividad importante.
El uso, y la gestión, de los cartuchos de tinta puede representar una importante carga de trabajo para cualquier usuario, eso ha quedado muy claro, pero hay tener en cuenta también otras dos claves que agravan dicha carga, y que pueden hacernos perder mucho tiempo: salir a comprar tinta y comparar precios para comprar cartuchos al mejor precio.
Imagina la escena, encuentras cartuchos a buen precio en una tienda, y decides ir al día siguiente a comprar un par de packs para tenerlos preparados antes de que se agoten los cartuchos que estás utilizando. Has buscado en varias tiendas, y ello te ha llevado bastante tiempo, pero al final parece que ha merecido la pena. Llegas a la tienda, le pides los cartuchos y, por desgracia, ya no quedan, y no tendrán nuevas unidades hasta dentro de una semana.
El ejemplo que hemos visto está basado en hechos reales, y todavía se sigue produciendo con frecuencia, pero con HP Instant Ink no solo podrías haberlo evitado, sino que podrías liberarte por completo de todos los problemas asociados al uso de cartuchos de tinta. Esto es posible gracias su funcionamiento automatizado y a domicilio, a su modelo de facturación basado en páginas impresas y a su programa de reciclaje incluido. Así es como funciona:
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