Tras superar el dilema de elegir una solución láser o de tinta enfrentamos otra cuestión importante, si debemos optar por una multifunción o por el contrario hacernos con una impresora convencional.

La respuesta en general es que si estamos seguros de que sólo vamos a necesitar imprimir durante un gran periodo de tiempo una impresora normal es la mejor opción, pero si por el contrario vamos a necesitar imprimir durante unos meses y a corto plazo tendremos la necesidad de acceder a funciones de fax, escáner y copia lo más acertado es ir a por una multifunción.

Un ejemplo es el mejor medio de ilustrar esta exposición. Imaginemos que nuestra pyme sólo necesita imprimir durante seis meses y posteriormente pasamos a tener necesidades de escaneado, copiado y fax. Si hemos comprado una impresora necesitaremos hacernos con una multifunción o, en su defecto, con equipos para complementar a nuestra impresora.

Esto supone una nueva inversión y por tanto más gastos, implicando además que no habremos amortizado adecuadamente nuestra inversión inicial.

Ventajas de una multifunción:

• Centralización del trabajo: Integra todas las funciones que necesitamos, de forma que no dependemos de ningún servicio externo.
• Ahorro de espacio: Al contar con todo lo necesario para nuestra empresa en un único producto no tenemos que hacer sitio para la colocación de varios dispositivos.
• Ahorro energético y de costes: Una multifuncional ofrece un consumo inferior al que enfrentaríamos si accediéramos a sus funciones con dispositivos independientes, además de una reducción de costes de gestión y administración.
• Inversión a prueba de futuro: No nos limita ni a corto ni a medio plazo, por lo que podremos amortizarla sin problema.
• Precio competitivo: Son más económicas que adquirir los dispositivos por separado.

Desventajas de una multifunción:

• Sus averías tienen un mayor impacto: Al depender de un todo en uno como las impresoras multifunción una avería de la misma puede afectar en gran medida a nuestro ritmo de trabajo.
• La centralización implica mayor organización: Tener todo el trabajo centralizado en una multifunción es algo positivo, pero obliga a tener un mayor y organización, algo que en ocasiones puede ser complicado.
• Una avería puede ser más cara: Las reparaciones de una multifunción pueden salir más caras que las de una impresora convencional, aunque en el fondo esto es algo que resulta comprensible por su mayor complejidad.
• Suponen una mayor inversión inicial: Su precio es normalmente mayor al de una impresora estándar dentro de su misma gama, aunque por lo general no marca una diferencia enorme.

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