Papel e impresión: consejos para hacer un uso más eficiente

Todo entorno de impresión necesita de dos grandes tipos de consumibles para funcionar correctamente: los cartuchos de tinta y el papel. Para disfrutar de una calidad de impresión profesional y de una fiabilidad total debemos elegir cartuchos de tinta original HP, ¿pero qué hay del papel?

La importancia del papel en la impresión está fuera de toda duda, al fin y al cabo es la base sobre la que se produce el proceso de impresión, y si este falla todo falla. Utilizar tinta original HP y papel HP de bosques certificados nos permitirá conseguir una experiencia totalmente óptima y reducir la huella de carbono de nuestra pyme.

Os recuerdo que gracias a HP Instant Ink, el servicio automatizado de tinta a domicilio de HP, podemos imprimir como un profesional reduciendo hasta en un 70% nuestros costes de impresión y aportando nuestro granito de arena al cuidado del planeta, ya que podremos reciclar todos los cartuchos gastados, y sin coste.

Cinco consejos para utilizar el papel de forma eficiente en la impresión

El papel es un pilar básico a la hora de imprimir, de eso no hay ninguna duda, y también influye en el grueso de costes que implica mantener un entorno de impresión profesional. Consumir papel de forma ineficiente puede elevar los costes, afectar a la calidad de nuestro trabajo y afectar incluso a nuestra impresora.

No es un tema que debamos tomarnos a la ligera, ya que las consecuencias de una mala utilización del papel pueden acabar siendo muy graves. Por ello vamos a compartir con vosotros cinco consejos que os ayudarán a utilizar de forma correcta y eficiente el papel a la hora de imprimir.

1.-No utilices el mismo papel para todo

Hoy en día podemos encontrar distintos tipos de papel con formatos y calidades muy dispares, y precios diferentes. Cada tipo de papel está orientado a un tipo de trabajo concreto, y por ello es fundamental saber cuándo utilizar uno y otro.

Por ejemplo, el papel fotográfico se debe reservar, como su propio nombre indica, para dichas tareas. Los papeles con mayor gramaje se suelen emplear en flyers, tarjetas y en impresiones con fines promocionales.

Tened siempre presente que el papel de mayor calidad debe ser el elegido a la hora de presentar proyectos a clientes, mientras que el papel de menor calidad puede ser perfecto para documentos internos (no salen de nuestra pyme) y proyectos «en sucio».

2.-No tengas miedo a usar papel reciclado

Este tipo de papel sigue generando cierta controversia, pero es muy económico, nos puede ayudar a reducir los costes de impresión y es perfectamente viable en documentos internos y borradores previos de proyectos importantes.

Si trabajamos con grandes cantidades de documentos internos su utilidad está fuera de toda duda, aunque debemos limitarlo a ese entorno por razones evidentes.

Antes de empezar a utilizar papel reciclado debemos asegurarnos de que nuestra impresora lo soportará sin problemas, ya que de lo contrario podríamos tener atascos de papel constantes.

3.-Utiliza la impresión a doble cara

El papel es un consumible que puede aprovecharse de dos formas muy distintas: imprimiendo por una cara o por las dos. Entiendo que la impresión a doble cara no siempre es viable, pero debemos intentar aprovecharla siempre que podamos.

En este sentido es importante recordar que podemos aprovechar para impresiones «en sucio» aquellas hojas de papel que solo hayan sido utilizadas por una cara sin problema.

Si utilizamos bien la impresión a doble cara y aprovechamos el papel que todavía tiene una cara libre, dándole una «segunda vida», podemos reducir el consumo de papel en un 50%.

4.-Imprime con el tipo correcto de papel en cada caso

Es un tema que ya hemos tocado anteriormente, pero en este punto queremos abordarlo desde otra perspectiva diferente, aunque igualmente útil e interesante.

Cada papel se concibe, como dijimos, para una tarea concreta, y debemos utilizarlo adecuadamente. No debemos recurrir a un papel inapropiado en un intento de ahorrar un poco de dinero, ya que el resultado podría ser desastroso.

Por ejemplo, si imprimimos una imagen promocional en un panel A4 normal en lugar de utilizar un tipo de papel con un gramaje superior el resultado puede no ser óptimo, y lo mismo puede ocurrir si renunciamos al papel fotográfico.

5.-Desecha el papel en mal estado o con defectos graves

Hemos dicho que hay que intentar aprovechar el papel que todavía puede tener una segunda vida, y hemos visto que la mejor manera de hacerlo es imprimir por la cara que todavía está en blanco, pero sin obsesionarnos.

Con esto quiero decir que antes de dar esa segunda vida al papel debemos asegurarnos de que está en buen estado y de que realmente podemos volver a utilizarlo.

Si vemos que el papel presenta pliegues o defectos importantes, o que no se encuentra en buen estado, lo ideal es desecharlo directamente, ya que podría acabar produciendo un atasco o una impresión errónea, con el gasto de recursos que ello conlleva.