Papel reciclado en pymes, aprende a utilizarlo

Utilizar papel reciclado para imprimir es una manera simple y efectiva de reducir los costes de impresión y la huella de carbono de nuestra empresa, ya que estamos utilizando un consumible barato que además ha sido fabricado sin tener que recurrir a nuevas fibras (no se han talado nuevos árboles).

Ya hemos visto que todos los consumibles importan a la hora de reducir costes de impresión y el papel reciclado es un elemento más que podemos aprovechar a nuestro favor, pero debemos aprender a utilizarlo correctamente ya que implica una serie de limitaciones que hacen que no sea viable para sacar adelante cualquier tipo de trabajo.

Por ello en este artículo os vamos a explicar qué requisitos debe cumplir el papel reciclado para que sea viable y cuándo debemos utilizarlo. Si tenéis cualquier duda podéis dejarla en los comentarios.

Requisitos que debe cumplir el papel reciclado

Como dijimos el papel reciclado es una opción que a la larga puede suponer un ahorro importante y contribuye a la sostenibilidad del medio ambiente, aunque es importe tener en cuenta una serie de puntos o requisitos mínimos que deberá cumplir dicho papel para ofrecer una experiencia óptima:

  • Tener un gramaje de 70 o más por metro cuadrado.
  • Cumplir con la normativa europea EN12281:2002.
  • No debe presentar una textura áspera o excesivamente rugosa, gruesa ni curvaturas anormales.
  • Bajo contenido en humedad, nunca superior al 5%.

Si el papel reciclado no cumple con estos mínimos puede dar problemas diversos como por ejemplo atascos en la impresora e impresiones de baja calidad con la tinta mal absorbida, así que aunque represente una forma fácil y ecológica de ahorrar debemos tener cuidado a la hora de elegirlo.

¿Cuándo debo utilizar el papel reciclado?

El papel reciclado es ideal para impresiones de documentos internos y combinado con el modo borrador permite conseguir una reducción de costes muy buena que se irá dejando notar de forma continuada si mantenemos el uso de ambos.

Evidentemente esos documentos sólo estarán en nuestras manos o en las de los trabajadores de nuestra pyme (círculo interno de nuestra empresa), así que aunque no tengan la calidad que lograríamos con papel normal e impresión en calidad media o alta son perfectamente funcionales.

Podemos poner varios ejemplos para guiaros un poco mejor; borradores de facturas, presupuestos o proyectos; documentos previos de modelos de contratos, documentación propia de despachos de abogados, procuradores o informes determinados en empresas que tengan una vida limitada.