Hace ya tiempo que los viajes de empresa han dejado de ser un pequeño lujo de asientos anchos, salas de espera de lujo y una atención a bordo personalizada. Los viajeros business ya no lo son tanto y muchos se ha tenido que acostumbrar a las «estrecheces» de aerolíneas como Easy Jet, Ryanair o Vueling, por citar algunos ejemplos populares entre las compañías aéreas de bajo coste.
Tanto es así, que son precisamente estas compañías low-cost las que están intentando atraer la atención de los ejecutivos, ofreciendo paquetes más flexibles que el que llega al «viajero normal», pero a una fracción del precio que les costaría en otra línea «clásica». Entre los principales servicios adicionales, se encuentran la elección de asiento, las tarifas flexibles que permiten cambios de reserva y el embarque prioritario en la mayoría de los casos.
EasyJet por ejemplo ofrece desde noviembre de 2012, la opción de escoger asiento en todos sus vuelos . La compañía ofrece así tres tipos de tarifas dependiendo del asiento seleccionado: 15 euros para asientos Extra Legroom (primera fila y salidas de emergencia); 10 euros para asientos ‘Upfront’ (primeras filas en A319 y A320) y cuatro euros para el resto de asientos.
Además, ha introducido una tarifa flexible que permite cambiar las fechas del vuelo sin recargo alguno ni limitación dirigida especialmente al pasajero de negocios. A esta medida se añade el acceso «fast track» en controles de seguridad y el servicio móvil de facturación y tarjetas de embarque. Con estas medidas la compañía espera poder aumentar hasta en un 20% sus viajeros business.
Por su parte Vueling ofrece la tarjeta «Vueling Pass» con la que los pasajeros disponen de hasta 10 accesos a las salas VIP de ciertos aeropuertos, además de ‘Fast Track’ para realizar un embarque preferente y garantizar espacio para el equipaje de mano. Además la aerolínea catalana tiene acuerdos especiales con hoteles y aparcamientos y una tarjeta de fidelización destinada a este tipo de viajeros.
Del mismo modo, Iberia Express ofrece clase ‘business’ y asegura que la butaca central siempre quedará libre en todos los vuelos domésticos y en los europeos, a fin de dotar de mayor confort y comodidad al pasajero.
También contempla menú a bordo y un trato preferente gracias a la elección de asiento, la anticipación de la tarjeta de embarque, un mostrador de facturación diferenciado, mayor franquicia de equipaje o embarque y desembarque prioritario. Otras aerolíneas como Air Berlin, Hop! (la low cost de Air France) o German Wings han lanzado sus planes para los viajeros profesionales.