Sin pedirlo directamente, el Círculo de Empresarios sugiere, siempre que tiene la oportunidad, que el Gobierno avance hacia una reforma laboral que cristalice en el despido libre. El penúltimo globo sonda lo lanzó ayer Josep Piqué en la presentación de su informe «Ideas para crecer».
En esta ocasión la institución propone que los días de indemnización por despido en los contratos temporales e indefinidos pasen de los 20 actuales por año trabajado, a los 18. Toda una declaración de intenciones si recordamos que antes de la reforma laboral de 2012, los trabajadores tenían derecho a 45 días por año trabajado.
La propuesta del Círculo de Empresarios, de salir adelante, supondría que un trabajador que fuera despedido por ejemplo en 2016 o 2017, cobraría prácticamente un tercio de la indemnización de otro que hubiese sido despedido en 2011.
En el otro extremo de la balanza, el documento también recoge la necesidad de alargar el tiempo de cobro de prestación por desempleo, condicionándolo no obstante a la aceptación de ofertas de trabajo.
El lobby de los empresarios también propone reducir el tipo de contratos, reduciéndolos únicamente a tres: indefinido, por necesidades empresariales (temporal) y juvenil (de formación).
Finalmente los empresarios vuelven a poner sobre la mesa la posibilidad de establecer un salario mínimo interprofesional (SMI) específico para los jóvenes con escasa cualificación (inferior al salario mínimo interprofesional) y que esté vinculado a la formación.
