La aventura de Microsoft en el terreno de las tablets podría estar próxima a su fin. El lanzamiento de Microsoft Surface Pro 3 el próximo 28 de agosto en nuestro país podría ser el último de la compañía, si tenemos en cuenta que Satya Nadella quiere enfocar a la compañía hacia sistemas operativos y servicios y alejarla de los dispositivos.
El segundo motivo es puramente económico. Desde la puesta en marcha del programa Surface, Micrososft registra 1.700 millones de dólares en pérdidas, tal y como reveló hace unos días ComputerWorld. Según los cálculos de la publicación especializada, en el último cuarto (con datos a 30 de junio), la compañía ingresó 409 millones de dólares provenientes de su negocio Surface, pero a cambio invirtió 772 millones de dólares. Los malos resultados económicos de hecho ya han llevado a la compañía a cancelar el lanzamiento de su esperada Surface Mini, que se esperaba que estaría disponible a lo largo del pasado mes de mayo.
El lanzamiento internacional de su última tablet supone por lo tanto una última apuesta a la desesperada. Porque tal y como le ha ocurrido con sus terminales móviles, Microsoft sí que está ofreciendo un buen producto (en nuestra opinión, uno de los mejores), pero por algún motivo no consigue llamar la atención de los compradores, que siguen viene en Windows 8.1 un producto extraño y que desde luego, no les ha conseguido conquistar.