Las impresiones en color son una importante herramienta de trabajo. Con ella podemos llevar nuestros proyectos al mundo real, crear contenidos únicos y mostrar a nuestros clientes todo lo que puede hacer nuestra pyme.
Sabemos que el valor de las impresiones en color es muy alto, y por ello hemos querido hacer este artículo en el que os daremos tres consejos sencillos que os ayudarán a mejorar su acabado.
- Utiliza archivos de alta calidad: son la base que utiliza la impresora, así que es fundamental que utilicemos archivos que presenten un alto nivel de calidad. En este sentido tiene una gran importancia la resolución del archivo, sobre todo cuanto trabajamos con imágenes y gráficos. A mayor resolución mayor calidad, esa es la regla general.
- Ajusta la configuración de la impresora a calidad alta: es otro punto importante. La calidad de impresión que escojamos será la que determinará en gran medida el resultado final que obtendremos. Si imprimimos en calidad baja los resultados pueden ser inapropiados para un proyecto que va a ir a manos de un cliente, así que en estos casos debes utilizar el ajuste de impresión en calidad alta.
- Elige bien el papel: no todos los tipos de papel son iguales. Para una impresión normal (un documento por ejemplo) el papel A4 con un gramaje por metro cuadrado de 80 gramos puede ser suficiente, pero para trabajar con imágenes complejas y proyectos gráficos intensivos el papel fotográfico nos ayudará a conseguir mejores resultados.
Utilizar cartuchos de tinta original HP también os ayudará a conseguir los mejores resultados desde la primera hasta la última página, y os permitiría reducir los costes de impresión hasta en un 50%.
