En MuyPymes estamos convencidos de que cualquier pequeña empresa debería invertir tiempo, esfuerzo y dinero en redes y medios sociales. Sin embargo también estamos convencidos de que no todos pueden (o deben) hacerlo.
Las redes sociales tienen unas barreras de entrada que pueden resultar insalvables para muchas pequeñas empresas. En este sentido, antes de decidirnos a dar el salto hemos de asegurarnos que tenemos los recursos y la energía necesaria para que nuestra presencia on-line sea algo más que anecdótica.
Tal y como explicaba Enrique Dans en el SIMO, «las redes sociales no son un moda pasajera». Están aquí para quedarse. Por este motivo, si queremos que nuestra empresa entre con el pie adecuado tenemos que tener en cuenta de que no es fácil, que exige mucha paciencia, y que debemos disponer de una estategia sobre qué es lo que queremos conseguir y cómo vamos a hacerlo. En este artículo repasamos algunos conceptos que tenemos que tener en cuenta antes de «lanzarnos al vacío».
Principales barreras de entrada
Demasiadas opciones
Cada vez hay más redes y medios sociales. Por un lado tenemos las redes sociales más consolidadas como Facebook o Twitter, pero por otro también hay otras redes sociales que pueden resultarnos más que interesantes para nuestro negocio y que se dirigen a una audiencia más pequeña, pero también más exclusiva. En este sentido, no siempre es fácil discernir en qué redes nos conviene estar y cuáles pueden resultar una pérdida de tiempo.
Poco tiempo
La mayoría de las pymes no tienen un departamento de marketing y si lo tienen es tan pequeño que no puede ocuparse de gestionar además la actividad de la empresa en medios sociales. Hay que tener en cuenta que para que una empresa destaque realmente en «social media» debe invertir varias horas de trabajo al día. Si no se hace de esta forma, la presencia de la pyme en Facebook, en Twitter o en otras redes no pasará de lo anecdótico.
Demasiado ruido, demasiados usuarios
Otro de los problemas a los que se enfrentan las pymes que quieren invertir en redes sociales es que en muchas ocasiones resulta complicado encontrar una audiencia adecuada para nuestros mensajes. Por poner un ejemplo, en Facebook hay más de 300 millones de usuarios registrados pero ¿cuántos de estos pueden convertirse en potenciales clientes? ¿quiénes pueden entrar a formar parte de nuestra red de contactos? Si nos lanzamos al «medio social» sin un plan previo podemos sin duda llegar a hacer mucho ruido y registrar muchos contactos pero ¿cuál es su verdadera utilidad?
Mejora la gestión del tiempo en redes sociales
Si hemos superado las barreras de entrada que pueden dificultar nuestra entrada en las redes sociales, lo siguiente que deberíamos plantearnos es el hecho de que dado que disponemos de poco tiempo para invertir en social media, debemos procurar que sea lo más productivo posible. En este sentido, podemos tener en cuenta lo siguiente:
Menos es más
Resulta mucho más efectivo centrar nuestros esfuerzos en una o dos redes sociales, que dispersarlos en muchas otras. Algunos pueden pensar que en cuantas más redes tengamos presencia, mucho mejor. Nosotros sostenemos en cambio la posición contraria: más vale invertir todos nuestros esfuerzos en destacar en una única red social (o dos) que tener cierta tímida presencia en diez redes sin acabar de conectar con una audiencia definida.
Programa tu tiempo
¿Cuánto tiempo debemos invertir en redes sociales? Dependiendo de las posibilidades de cada empresa, lo ideal es reservar un espacio de tiempo diario para mejorar nuestra presencia en la Red. No importa si son dos horas al día, media hora o 20 minutos. Una estrategia de éxito pasa por una presencia y actualización constante.
Aún mejor, una estrategia efectiva pasa por fraccionar el tiempo disponible en dos o tres partes a lo largo de la jornada laboral. Si disponemos de una hora, la fraccionaremos en tres periodos de 20 minutos, situándolos en momentos clave: al llegar al trabajo, después de la hora de la comida, y a la salida. Son precisamente estos momento cuando más usuarios se conectan a las redes sociales.
No sólo cuenta tu empresa
El adjetivo «social» que sigue al sustantivo «red» no está ahí por casualidad. Social implica que debemos mantener una conversación activa con nuestros usuarios, aportándoles elementos de valor. Una red social no es el lugar adecuado para desarrollar una política de autobombo («qué buenos somos») sino de explicar por qué somos útiles para nuestros clientes, qué es lo que está pasando en nuestro sector, qué pueden aportar otros actores (incluida nuestra competencia), resolver dudas… etc.
Utilizar las herramientas apropiadas
Podemos ahorrarnos mucho tiempo si además de invertir en social media, contamos con ciertas herramientas o programas que nos ayudan a automatizar y simplificar procesos. Un buen ejemplo de esto los constituye TweetDeck, una aplicación desarrollada sobre Adobe Air que nos permite gestionar de forma muy efectiva nuestra presencia en Twitter.
La audiencia adecuada
Al margen de que muchos usuarios a los que nos conocemos pronto comenzarán a seguirnos (a la vez que nosotros seguiremos a muchos otros desconocidos) tenemos que asegurarnos que en nuestra red de contactos contamos con varios representantes de los siguientes grupos:
Líderes del sector
Lo primero que hemos de hacer nada más comenzar nuestra presencia en Social Media es identificar la presencia en redes sociales de los líderes de nuestro sector. Si con un poco de suerte y perseverancia nos añaden a su red de contactos, algo tendremos ganado. Esto por sí solo nos nos garantiza nada, pero si invertimos bien y seguimos una estrategia correcta podemos empezar a llamar la atención de las personas adecuadas.
Otras empresas del sector
Por las mismas razones que esbozábamos en el punto anterior, resulta muy recomendable seguir la «actividad social» de las empresas de nuestro sector. No sólo porque podemos aprender cosas nuevas, sino porque creamos un «tejido social» del que seguramente podemos salir beneficiados.
Clientes
Una buena estrategia de marketing de fidelización es conectar directamente con nuestros clientes. Si tienen presencia en la Red, seremos los primeros en entrar en su lista de contactos, y si no la tienen les invitaremos a sumarse a nuestra red social, donde proporcionaremos buenos contenidos, ofertas, promociones, etc. que tengan un valor que no se puede obtener fuera de la red social.