A la par de las explicaciones que EE UU le pide a Google sobre la recogida de datos de las redes WiFi de particulares, Austria también entra en el tema, prohibiéndole al gigante de Internet la circulación de los coches de Street View por el país.
La Protección de Datos de Austria (DKS) ha confirmado que Google carece de permiso para almacenar datos privados, por lo que ha ordenado que se suspenda la circulación de sus vehículos de captación de imágenes, al tiempo que ha lanzado una investigación para aclarar lo sucedido.
Waltraut Kotschy, director de la DKS, consideró que la investigación durará unos dos meses y en función de los resultados se decidirá si se vuelve a permitir circular a los vehículos de Google. Por su parte, la asociación privada para la protección de datos ARGE ha interpuesto una denuncia contra la empresa de informática al considerar que la grabación de los datos de navegación de las redes WiFi no se produjo de forma accidental.
