Habla y presentar nuestras ideas en público es todo un arte. Un desafío que comienza desde que determinamos qué queremos contar y cómo o plasmamos en una presentación, hasta cuando finalmente tenemos que hacer esa presentación en público. ¿Cuál es la mejor forma de hacerlo? Sin que haya grandes fórmular magistrales, sí que hay pequeños detalles aquí y allá que han demostrado ser más que útiles a la hora de impresionar a nuestra audiencia. En Inc.com nos ofrecen hoy 52 trucos para una presentación espectacular. Hoy os ofrecemos los 25 primeros.
1. Adáptate a las creencias a ideas de tu audiencia. A los seres humanos nos encanta que una persona que no conocemos, refuerce nuestras ideas y nuestra visión del mundo. Es difícil conseguir cambiar eso en una presentación.
2. Tu audiencia sabe leer. Nunca leas tus diapositivas. Tu audiencia sabe leer. En todo caso, puedes añadir un comentario adicional si la explicación no es suficientemente clara.
3. Evita los clichés. Utilizar clichés, frases manidas, lugares comunes, etc. dan la impresión de que tus ideas son poco originales y encorsetadas.
4. Sé tú mismo. Cuando intentas ser una persona que no eres, tu audiencia lo va a notar desde el minuto 1 y ya no va a confiar en el mensaje que quieres transmitir.
5. Empieza llamando la atencion. Captura la atención de tu audiencia presentando una primera diapositiva sorprendente, algo que no puedan esperar.
6. Cree en tu mensaje. Difícilmente vas a convencer a tu audiencia de la validez de tu ideas si tú no eres el primero en realmente creer en ellas. 7. Refrescos y snacks Si vas a presentar ante un grupo de menos de 20 personas, el llevar algunos refrescos y snacks para compartir va a conseguir una predisposición positiva a escuchar.
8. Pausas. Especialmente cuando el mensaje que quieres transmitir es denso, puedes intercalar en tu presentación algunas pausas en el discurso introduciendo vídeos, imágenes curiosas o haciendo preguntas directas.
9.Revisa el material técnico. Nunca des por garantizado que el proyector de la sala va a funcionar, que el mando tiene pilas o que por supuesto que podrán proporcionarte un cable HDMI. Comprueba todo dos veces antes de lanzarte a la arena.
10. No te pases con siglas y acrónimos. No está mal el utilizar siglas y acrónimos que den más dinamismo a la presentación y te permitan elaborar un discurso más fluido. No obstante, no abuses o convertirás la presentación en un galimatías incomprensible.
11. Personaliza tus presentaciones. Aunque vayas a dar la misma presentación ante grupos diferentes, haz lo posible por adaptarla a tu público. No te repitas y estudia cómo puedes ser diferente.
12. No te presentes. Si puedes, consigue que sea otra, la persona que explique quién eres y por qué estás en esa sala presentando.
13. Evita los efectos especiales. Los programas de presentaciones siguen manteniendo todo tipo de transiciones, textos en tres dimensiones, objetos que vuelan… Intenta evitar todo eso y mantén un diseño sencillo.
14. Apuesta por el social media. Anima a los participantes a compartir sus pensamientos e ideas en Twitter y otras redes sociales, utilizando un hashtag para la ocasión. Si puedes, muestra los tweets en pantalla.
15. Utiliza fuentes grandes. Tus diapositivas deben resultar perfectamente legibles desde el lugar más alejado de la habitación en la que vayas a presentar.
16. Evita las generalidades. Utiliza en tu discurso hechos probados, datos cuantificables, verificables y sorprendentes. Los conceptos vagos, las especulaciones vacías de significado no llevan a ningún lado.
17. Utiliza los referentes culturales adecuados. Si presentas ante un grupo de universitarios, las referencias que hagas a series como “Alf o”El equipo A» van a caer en saco roto. Una vez más, adáptate a tu audiencia.
18. Mirada al frente. Los asistentes han acudido a tu presentación porque quieren verte a ti, no a un señor leyendo notas o peor aún, un señor que continuamente les está dando la espalda.
19. Sigue la regla 20/20. Limita tu presentación a 20 minutos. Ensáyala 20 veces hasta que sea perfecta.
20. Olvídate de la jerga. El utilizar terminología muy específica de los negocios o del sector en el que te mueves, te va a hacer parecer pomposo y pedante, evítala a menos que sea imprescindible.
21. Emociona. Las presentaciones más poderosas son aquellas que apelan a las emociones. Las abstractas y muy intelectuales suelen olvidarse con más facilidad.
22. Simplifica los gráficos más complejos. Si necesitas utilizar gráficos complejos, intenta explicarlos enfatizando en distintos segmentos en las siguientes diapositivas, de forma que sea más sencillo comprender la idea que quieres transmitir.
23. Pule tu mensaje. Elimina todos los detalles que resulten irrelevantes y repetitivos, que distraigan del mensaje principal que quieres transmitir en cada momento.
24. Identifica el próximo paso. La mayoría de las presentaciones tienen como objetivo provocar una reacción, la toma de una decisión. Al final de tu presentación identifica y deja claro cuál debe ser la próxima acción que debería llevar a cabo tu audiencia.
25. Keep it simple. Cuanto más complicada y compleja sea tu presentación, más fácilmente será olvidada. Lo sencillo es a menudo, lo más memorable.
