Más de la mitad de las medianas y pequeñas empresas españolas está apostando por un enfoque robotizado de sus procesos de negocios, según el estudio de Kaizen Institute, sobre la implementación de procesos digitales a través del sistema RPA (Robot Process automation).
En Europa, con la tecnología existente en la actualidad, solo el 5% de trabajos son 100% automatizables, sin embargo, en el 60% de los puestos de trabajo se pueden automatizar hasta un 30% de sus actividades. Estas actividades son principalmente tareas repetitivas de poco valor añadido para el trabajador.
Este sistema de RPA instala un software en el ordenador del usuario, permitiendo realizar de forma automática, aquellas tareas que se basan en reglas claras y estándar, teniendo también la opción de incorporales inteligencia artificial en sus versiones más avanzadas.
La programación de estos robots es realmente intuitiva y visual, haciéndolo muy accesible a muchos perfiles de trabajador, permitiendo a los propios usuarios crear sus robots. En estos procesos de robotización, la componente diferencial para los proyectos de éxito reside en la capacidad de análisis y mejora de los procesos de negocio previo a su robotización. La mejora, simplificación y optimización de los procesos previa a la automatización es necesario como input para el programador y además reducirá significativamente la inversión en robots, evitando la automatización de procesos con mucho desperdicio o pasos innecesarios.
Una de las principales ventajas de este abordaje del proceso de digitalización, es su enfoque de bajo coste, requiriendo una inversión mínima y obteniendo retornos de la inversión inferior a 6 meses. Esto lo convierte, a diferencia de otras estrategias de digitalización, en un abordaje accesible para pequeñas y medianas empresas, con gran impacto en sus cuentas de resultados.
Otra gran ventaja, frente a otras estrategias, es su flexibilidad y escalabilidad, las funcionalidades automatizadas se pueden modificar las veces que sean necesarias sin coste añadido, al igual que, al ser escalable, permite aumentar o reducir el número de robots de forma lineal según las necesidades de la empresa.
Según Javier Langa, Manager de Kaizen Institute Western Europe: “Aunque sigue existiendo cierto temor en la sociedad a la pérdida de puestos de trabajo ligado a la automatización, la realidad es que el avance de nuevas tecnologías genera un saldo total positivo de puestos de trabajo y permite sacar mucho más potencial de los trabajadores, liberándoles de las tareas tediosas de poco valor añadido para las que no es necesario el potencial del cerebro humano y enfocarse en proyectos que involucren un proceso creativo”. Un ejemplo claro de este caso concluye Javier, “es el asistente administrativo que en la actualidad dedica gran parte de su tiempo a procesar datos de forma manual en varias plataformas, para generar informes que utilizan equipos de dirección. A futuro, este procesamiento de datos será automático y podrán emplear su tiempo y capacidad para realizar análisis de los datos, interpretarlos, buscar tendencias y poder aportar orientación a las decisiones que la compañía debe tomar”.