El solucionador de problemas de Windows 10 es una herramienta muy interesante. No se trata de algo realmente nuevo, ya que como sabrán muchos de nuestros lectores esta característica ya se encontraba disponible en otras versiones anteriores de Windows, aunque de una manera mucho más limitada, y menos efectiva.
La compañía que dirige Satya Nadella ha introducido mejoras importantes en el solucionador de problemas de Windows 10, hasta tal punto que la ha convertido en una herramienta que podemos ejecutar en cualquier momento de forma directa y elegir, entre una amplia lista de opciones, qué problemas queremos que intente resolver.
En versiones anteriores de Windows, como Windows XP por ejemplo, la utilidad de esta herramienta era más que cuestionable, pero con Windows 10 la cosa cambia por completo. Durante los últimos cuatro años la he utilizado en tres ocasiones, dos de ellas para resolver un conflicto con el sonido y en otra ocasión por un fallo de conexión a Internet, y en los tres ha funcionado.
No es una herramienta milagrosa, es decir, si tenemos un problema grave no podrá resolverlo de forma automática, pero su utilidad está fuera de toda duda y puede ayudarnos a resolver problemas puntales y de menor importancia que resultan, sin embargo, difíciles de identificar y que pueden consumir mucho tiempo.
Para abrir el solucionador de problemas de Windows 10 solo tienes que entrar en la barra de búsqueda de Cortana e introducir «Solucionar otros Problemas«, haces clic en el primer resultado y llegarás al menú que puedes ver en la imagen adjunta. Seleccionas el problema que quieres resolver y dejas que trabaje la herramienta de forma automática.
Es muy sencilla de usar, pero también muy útil, y ofrece una enorme cantidad de opciones. Con ella podemos resolver desde problemas de red y de sonido hasta fallos de conexión de dispositivos, errores en la tienda y muchas cosas más. Si tienes un problema cuya causa no logras identificar no lo dudes, dale una oportunidad.
