«La Covid-19 llevó a la mayoría de las organizaciones a cancelar, interrumpir o posponer sus proyectos de transformación empresarial por falta de experiencia interna, presupuesto o limitaciones a la hora de contratar nuevo personal. Sin embargo, un número destacado de compañías decidieron incorporar interim managers durante un período de tiempo concreto para liderar esa misión, en esas circunstancias, de una manera rápida, rentable y eficiente. Esta solución también está siendo ampliamente empleada para la gestión de proyectos de reestructuración financiera y de RRHH. Estos son sólo dos ejemplos que ejemplifican y testifican el aumento de la demanda de estos expertos en nuestro mercado”, explica Sylvain Namy, director de la División de Interim Management en Robert Walters.
“No obstante, hay una idea de fondo que explica no sólo su crecimiento actual, sino su potencial. La crisis del Covid-19 ha supuesto una revolución laboral y provocado un cambio de mentalidad que influirá de manera positiva en esta modalidad de trabajo. Profesionales experimentados están valorando ahora cuál es el impacto de su función dentro de su organización, están replanteándose su flexibilidad laboral, están deseando darle más sentido y autonomía a su rol a través del interim management”, afirma Namy.
Interim managers más demandados en 2021
En 2021 crecerá significativamente la oferta de empleo de interim management para estas tres áreas de especialización:
–Finanzas: debido al contexto de crisis económica, las empresas buscarán reducir sus costes, mejorar su productividad y optimizar la gestión de su tesorería. Los departamentos financieros se mantendrán en primera línea y reforzarán sus equipos a través de la contratación de perfiles interim management (CFO, Head of Controlling, Credit Collection Manager) para acometer proyectos de reestructuración financiera, control financiero, gestión de deuda y cobros.
–RRHH: se contratarán interim managers con amplios conocimientos en Relaciones Laborales para gestionar la evolución de las plantillas y desarrollar nuevas políticas de trabajo, destacando en esta misión la figura del HR Director/Manager.
–Tecnología: un gran número de compañías comenzarán o continuarán apostando por el desarrollo de sus canales de venta online, solicitando interim managers especializados en proyectos de transformación y crecimiento digital, despuntando la figura del Digital Transformation Director.
Habilidades más buscadas
Más allá de la experiencia y los conocimientos técnicos, las habilidades interpersonales son claves en esta figura. Las empresas buscan interim managers con capacidad para analizar y adaptarse a situaciones de complejidad, tomar decisiones rápidas, con fuertes habilidades relacionales, una clara orientación a resultados, una gran autonomía y visión holística, y un alto nivel de credibilidad e influencia.
“En un interim management se valoran especialmente el coraje y la iniciativa. Lo que las empresas buscan cuando contratan este tipo de figura es asegurar su competitividad a través de la ejecución de una misión en un plazo de tiempo determinado, así como beneficiarse de los conocimientos, experiencia y del impacto positivo que genera tener a un gran experto a bordo del negocio”, concluye Namy.
Sectores con mayor número de proyectos
Desde la adopción de este modelo de contratación en España en los 2000 hasta hace 5 años, el ámbito industrial es el que contrataba en mayor medida a estos expertos, aglutinando prácticamente el 85% de los proyectos interim management. Actualmente, esta cifra ha descendido al 50%, creciendo la demanda de este tipo de talento en sectores como el de turismo, servicios financieros, seguros y banca.
Motivaciones principales
Las motivaciones de los interim managers para seguir esta trayectoria y estilo de vida laboral son variadas: tener la capacidad de aportar sus habilidades y experiencia en diferentes compañías; conseguir una mayor conciliación laboral y familiar; contar con una mayor flexibilidad a la hora de elegir los proyectos en los que trabajar; experimentar diferentes sectores, culturas y tipos de compañía; trabajar en entornos de alta exigencia, transformación y/o cambio; o disfrutar de una mayor independencia, poder de decisión y autonomía en sus funciones respecto a la compañía contratante.