En España existen, (o para ser más explícitos, existían), ya que los datos que tenemos son de antes de la irrupción de la pandemia del coronavirus, 385 empresas fintech, que ofrecen un amplio abanico de servicios y emplean a 7.500 personas. Las empresas fintech son aquellas que utilizan la innovación y la tecnología aplicadas al sector financiero. A nivel nacional
Actualmente, la actividad crediticia es la que mayor volumen de empresas aglutina, según el Cuaderno de Información Económica de FUNCAS (Fundación de las Cajas de Ahorro), donde se ha profundizado en cómo es la fintech española.
Después del liderato destacado de las empresas dedicadas al crédito, tenemos a las dedicadas a los pagos electrónicos, que suponen un 15,06% del total. Las empresas dedicadas a las inversiones y las organizaciones que ofrecen soluciones contables y fiscales sumarían más de un 12%.
Si nos centramos en el territorio en el que operan, Madrid concentra el 56% de este tipo de empresas. De lejos le siguen Barcelona (19%) y Valencia (7%).
¿Qué perfil de empresario está detrás de estas organizaciones?
Según el anteriormente citado estudio, el 93% de las empresas de la industria financiera moderna fueron puestas en marcha por grupos de emprendedores, mientras que el 7% la creó a partir de una compañía ya en el mercado.
En cuanto al atractivo de este tipo de empresas para los inversores, cabe destacar que el pasado año se recaudaron más de 190 millones de euros de financiación, y que desde hace un lustro se han captado más de 400 millones de euros en más de 240 rondas de financiación.
Solo el 15% de los españoles es usuario de una fintech
El cliente de las fintech, de momento, sigue siendo un número bajo, aunque con un gran potencial de crecimiento. Según los últimos datos, un 15% de los españoles es usuario de una fintech. Su rango de edad se sitúa entre los 26 y los 35 años. Se trata de un usuario joven que, por lo general, está desencantado con la banca tradicional.
Pero también es un cliente infiel a estas firmas, según un estudio de Entelgy Digital, lo que aún supone un alivio para la banca tradicional. El 56% de los usuarios de servicios bancarios sigue confiando en confiar sus finanzas a una entidad tradicional. “Los clientes de las fintech o los neobancos son menos fieles y la banca tradicional tiene una ventana de oportunidad para renovarse”, recalca este informe.
En España, el 85% de los usuarios de fintech las utiliza para efectuar pagos, mientras que el 38% emplea estas plataformas para gestionar mejor sus finanzas. Además, casi un 25% conoce y está familiarizado con la compra de criptodivisas.
Un billón de visitas a las aplicaciones
El auge de las apps está muy presente en las empresas fintech en España ya que esta modalidad supera ampliamente a la banca online y a la sucursales. Y es que los usuarios accedieron a sus aplicaciones financieras un billón de veces en 2019, lo que supone un crecimiento del 100% respecto a 2017. Desde para realizar operaciones bancarias tradicionales hasta para operar en bolsa, el móvil ocupa un rol central en la gestión de las finanzas diarias.
De hecho, el entorno digital ha superado ya a la sucursal como principal canal para determinados segmentos claves como la generación Y (los millennials) y el móvil es el principal canal para realizar gestiones bancarias digitales (59%), seguido del ordenador (32%) y por último la tablet (7%). Es lo que se desprende del Informe Ditrendia Mobile en España y en el Mundo 2020” elaborado por Ditrendia y recogido por El Mundo Financiero.
No obstante, no todo se reduce al teléfono móvil. El 94% utiliza la banca digital al menos una vez al mes. Usan la banca móvil para transacciones relativamente simples y rápidas, como transferencias o consultas de saldo, pero prefieren usar la banca digital para transferir dinero internacionalmente, realizar consultas sobre productos o actualizar la información de la cuenta.
La comodidad y el ahorro de tiempo al poder realizar transacciones, transferir dinero o gestionar sus asuntos financieros con solo tocar una pantalla, son algunas de las ventajas que hacen que los usuarios se decanten por la banca móvil. Esta facilidad de uso hace que las aplicaciones bancarias tienen lo mejor tasa de retención respecto al resto de aplicaciones móviles.