Los programas como Factusol un programa fácil para facturación, se han convertido en el primer paso hacia la digitalización de las pymes. En el nuevo horizonte empresarial que se ha abierto tras la pandemia, contar con herramientas digitales que nos ayuden con las gestiones es vital para la supervivencia del negocio.
La facturación manual puede convertirse en un quebradero de cabeza para los trabajadores, sobre todo en aquellas pequeñas empresas que no cuentan con un departamento destinado a ello, o para los autónomos, que lo tienen que hacer por sí mismos todas las labores de gestión. Lo más habitual es que se hagan facturas con word o con excel, pero estos programas no están programadas para tal fin, por lo que no pueden ayudar tanto como lo haría un software especializado.
Las ventajas de tener un programa de facturación
El software de facturación es parte fundamental de las herramientas de contabilidad con las que las empresas pueden agilizar ciertos trámites, ahorrando tiempo y dinero. Las facturas manuales pasaron a mejor vida, y con ellas los errores humanos, las repeticiones y la desorganización entre las pagadas y las vencidas, por ejemplo. En general, estas son las ventajas de un software de facturación:
- Reducen el papeleo físico. ¿Te acuerdas de esas oficinas con estanterías abarrotadas de archivadores? Pues eso ha pasado a la historia, ya que con las facturas digitales lo único que necesitarás es un espacio de almacenamiento virtual que no ocupa espacio. Puede ser en la nube o en un dispositivo físico, como un disco duro externo.
- Control de todas las facturas. Encontrar la factura que te interesa y ver si está o no pagada es cuestión de segundos, también puedes configurar el sistema para que te salgan avisos de cuáles están vencidas.
- Enumeración correcta. Las facturas han de ser siempre correlativas, según la fecha de emisión pero, de manera manual, podemos equivocarnos y hacernos un lío con la numeración. Un programa lo hará de forma correcta y automática, cumpliendo con la normativa.
- Automatización. Cada vez que factures a un cliente antiguo no necesitarás volver a poner todos sus datos, sino que estos están almacenados en el programa y se cumplimentarán automáticamente cada vez que emitas una factura para él, ahorrándote tiempo y posibles errores.
- Gestionar los impuestos. Una de las funcionalidades básicas y más importantes de cualquier software de facturación es la contabilización de los diferentes impuestos, para que esté todo controlado, ya sea IVA, declaración de la renta, gastos, etc. El programa va creando un documento con la información fiscal necesaria para que no tengas que perder tiempo en estas gestiones tan tediosas.
- Elegir diferentes plantillas y otros idiomas. Con el software de facturación se abre un universo de posibilidades contables, no solo podrás facturar en otro idioma y con otras divisas, sino que también podrás adaptar los documentos legales a las diferentes circunstancias.
- Gestión del stock y del negocio. Ver cómo va tu negocio en forma de gráficas y datos es mucho más sencillo, así puedes hacerte una idea de lo que funciona y lo que no, comparar la facturación con otros años, tener una visión real del inventario, saber qué te falta y qué te sobra, etc.
En definitiva, el software de facturación es una herramienta útil, que ahorra tiempo y dinero a autónomos y pequeños empresarios que hagan la contabilidad para ellos mismos. Las ventajas son enormes y te evitarán un montón de errores humanos, así como dejar de perder el tiempo en buscar facturas o información relativa a ellos.
